La reunión que mantuvieron ayer, en Madrid, los representantes de USO y el gerente del Instituto para la Reestructuración de la Minería del Carbón (IRMC), Juan Miguel Benítez, con la que se iniciaba la negociación de la parte social del Marco General de la Minería del Carbón 2013-2018 , confirmó los peores pronósticos de las organizaciones sindicales. Desde el Ministerio de Industria se afirmó «con rotundidad» que «no habrá prejubilaciones», como han existido en los planes anteriores, «de ninguna de las maneras». Los mineros que sean despedidos cobrará una indemnización máxima de 8.000 euros.

Los trabajadores excedentes, que según los planes presentados por las empresas mineras pueden ascender a 1.300 (500 hasta 2015 y otros 800 entre esa fecha y 2018), aunque según dijo ayer el Secretario General de la Federación de Industria de USO, José Vía, la cifra podría situarse al final «en torno a 2.000 porque las cifras que manejan las empresas e Industria no nos cuadran», sólo verán mitigada su situación mediante bajas incentivadas, un plan de empleo alternativo para las cuencas mineras a partir de empleos medioambientales o de reforestación, y recolocaciones en posibles explotaciones a cielo abierto que se pretenden abrir en Asturias y en minería metálica.

La oferta puesta ayer sobre la mesa para indemnizar a los mineros que vean cómo su empresa cierra serían de 8.000 euros más 30 días por año trabajado, con un máximo de dos anualidades, para los trabajadores cuya explotación sea clausurada antes del 31 de diciembre de 2015; y de 6.000 euros más 25 días por año trabajado, también con un máximo de dos anualidades, para aquellos cuya explotación eche el candado entre 2016 y 2018.

«Para nosotros cualquier posibilidad de acuerdo pasa porque existan prejubilaciones, como hasta ahora», explicaba tras el encuentro José Vía. «Pero el Ministerio no las contempla, hoy ya lo ha dicho con total claridad y nos ha dado un no rotundo a las prejubilaciones. Nosotros les hemos dicho que para estampar nuestra firma en cualquier tipo de acuerdo es imprescindible que haya un sistema de prejubilaciones», añadió.

Además, y ese fue el otro asunto de «principal controversia» durante las cerca de tres horas de reunión entre el gerente del IRMC y los representantes de USO, en todo este sistema de bajas incentivadas, recolocaciones y empleo alternativo no estarán incluidos los trabajadores de las empresas subcontratadas, que según los propios datos manejados por Industria se situarían en unos 1.500 mineros del total de cerca de 5.000 que mantiene el sector. Los subcontratados volverán a manifestarse esta mañana ante la sede de Hunosa, en Oviedo.

«Nosotros consideramos», afirmó el Secretario general de la Federación de Industria de USO, «que a los trabajadores de las contratas y las subcontratas hay que darles una salida similar a los de las plantillas propias. Si hay dificultades técnicas habrá que buscar una solución, pero nosotros entendemos que no se puede dejar a estos trabajadores tirados».

El Gobierno continúa hoy con las negociaciones con una reunión con CC OO

La reunión que ayer celebraron los responsables del Ministerio de Industria con USO abre la nueva ronda de negociaciones entre el Gobierno y los representantes sindicales del sector del carbón. Al contrario que en otras ocasiones, estos nuevos encuentros se realizan de forma individualizada con cada central. Hoy le tocará el turno para verse con Industria a la Federación de Industria de Comisiones Obreras, mientras que el jueves lo hará FITAG-UGT. La semana siguiente volverá a haber más reuniones, también bilaterales. En la imagen, Miguel Sánchez, Marco Antonio Martínez, José Vía y Luis María Fernández, de USO, ayer por la mañana ante la sede de Industria.