El Ayuntamiento de Lena no permitirá la ampliación de la empresa Asturiana de Laminados (Asla), que supondrá la creación de ochenta puestos de trabajo, hasta que el polígono de Villallana esté urbanizado. Así respondió ayer el alcalde de Lena, Ramón Argüelles (IU), a la nueva propuesta de los responsables de la firma que sugirieron iniciar la actividad en su nueva nave antes del acondicionamiento del área industrial. "Llevamos diez años funcionando así y no ha pasado nada", había argumentado el presidente de Asla, Macario Fernández.
La respuesta del regidor no se ha hecho esperar. Argüelles replicó ayer que "la ampliación de Asla y todas las actuaciones previstas para el polígono de Villallana se harán ajustadas a la legalidad". "No podemos saltarnos la normativa vigente a la torera", añadió el máximo dirigente local.
La problemática del polígono de Villallana se remonta a hace diez años. Fue entonces cuando empezaron a funcionar dos empresas en el área industrial, Asla y Rioglass. El suelo estaba sin urbanizar, pero estaba prevista una partida de fondos mineros para terminar la actuación. Llegó la crisis y el recorte en las ayudas a la reindustrialización de las Cuencas. El proyecto, presupuestado en doce millones de euros, quedó en el aire.
El gobierno de Lena inició entonces una nueva planificación para el polígono, más modesta y ajustada a los tiempos de crisis. La ejecución del nuevo plan parcial, en este momento en fase de información pública, requiere una inversión de dos millones de euros. El Ayuntamiento busca financiación. "Son unos fondos a los que no renunciaremos", destacó ayer el regidor. En este sentido, añadió que "es imprescindible que se urbanice el suelo para poder hacer cualquier actuación más en este polígono, que merece un entorno digno".
Macario Fernández comparte esta visión. Según el presidente de Asla, "nadie quiere más el acondicionamiento del polígono que nosotros". "Resulta incómodo recibir a clientes en esta situación", añadió. Pero el tiempo corre en su contra. La firma quiere poner en marcha una nueva línea de producción que permitirá una amplia oferta de cinc de ancho 1.500 milímetros, una medida que sólo se producirá en Villallana.
El nuevo laminador empezará a funcionar el próximo mes, pero sólo producirá cinc simple. La nueva línea es esencial para mejorar la oferta y poner a la empresa a la cabeza del sector. La ampliación permitirá la creación de ochenta puestos de trabajo que se generarían, según Fernández, en el concejo de Lena. Si no hay una solución antes del próximo mes de octubre, deslocalizarán su producción.
