Si el viernes el protagonista absoluto de las fiestas de Lantero fue King África con su concierto, ayer le tocó el turno a los burros. Jornada animalística en la localidad sanmartiniega la que se vivió con el "burrocross", que hizo las delicias de pequeños y mayores, a pesar de que la climatología no acompañó. Desde la organización apuntaron que esta era una manera de "hacerles un hueco también a los niños dentro del programa de las fiestas, aunque es algo abierto para todo el que quiera participar"

Un total de nueve ejemplares de burro sirvieron para que los asistentes que lo desearan pudieran completar un pequeño circuito casi improvisado, que incluyó algunos obstáculos para "hacer el recorrido un poco más emocionante", como añadieron desde la Asociación Valle de Lantero.

Esta gymkhana es la primera que se celebra en las fiestas de la localidad, y la prueba no salió del todo mal a pesar de que su inicio se demoró: al mismo tiempo que se organizaba el circuito, también se preparó el escenario para la actuación nocturna de la Orquesta Tekila, por lo que todo se retrasó un poco más allá de la hora prevista.

Abierta para todos, los más pequeños fueron los que más disfrutaron de la actividad, tanto antes como durante. Mientras se construía el que iba a ser el itinerario, quien quiso pudo acercarse a fotografiar o acariciar a los animales, que posteriormente No lo pusieron sencillo; se "aceleraron" y tuvieron que ser controlados antes de que nadie se subiese a ellos. Esto supuso las risas entre todos los niños, y de hecho algunos, nerviosos, dijeron entre carcajadas tener "algo de miedo por si el burro se altera y me tira".

Durante aproximadamente dos horas, los presentes pudieron recorrer el óvalo en una iniciativa que, como aseguraron los organizadores, tenía "la idea de divertir, no de hacer una competición". La marcha estuvo además acompañada de música tradicional asturiana, con la gaita y el tambor amenizando el final de la segunda tarde festiva de Lantero. El festival de la sidra tuvo también cabida durante la hora de la cena, y fue ese el momento en el que más afluencia de gente apareció por la localidad.

La verbena nocturna, corrió esta vez a cargo de Tekila y de Disco Chospito Show. Las fiestas de Lantero de este año se cierran hoy: por la mañana tendrán lugar la diana y la alborada, para al mediodía celebrar la tradicional misa en Villacerdé, acompañada de nuevo por música tradicional asturiana. No faltará el reparto de la botella de vino y el bollu preñau, para terminar con un festival de bailes latinos al final de la tarde, que despedirá esta edición.