Unas dos mil personas salieron ayer a las calles de la localidad leonesa de Ponferrada en defensa de la minería del carbón. La movilización exigió a Endesa que abra su parque de carbones al carbón nacional.

Así lo explicó el secretario regional de la minería de UGT, Jorge Díez, para quien el real decreto que tiene en marcha el Ministerio de Energía para endurecer las condiciones del cierre de las térmicas "llega tarde y no es una solución inmediata". "Abogamos porque el mecanismo que se active sea otro y pase por establecer los consumos mínimos de carbón nacional en las centrales", subrayó el sindicalista.

Los trabajadores de Unión Minera del Norte (Uminsa) e Hijos de Baldomero Alonso se encuentran entre los afectados ya que verán paralizada su actividad definitivamente en caso de que el suministro de mineral nacional no se reanude de forma inmediata. De hecho, Uminsa no ha podido suministrar carbón desde el pasado mes de enero, y la extinción de los contratos supondría la pérdida de todos sus derechos a los trabajadores, que no podrían acogerse a medidas sociales, como bajas incentivadas y prejubilaciones, hasta 2018.

A la convocatoria, realizada por UGT sin el apoyo de CC OO, han acudido centenares de mineros de El Bierzo y Laciana, Asturias y Palencia, así como alcaldes y concejales de cuencas mineras, representantes de partidos políticos y sindicatos y ciudadanos.

Díez ha asegurado que seguirán demandando la compra de mineral autóctono por parte de las térmicas mediante reuniones con las administraciones y volviendo a concentrarse este jueves y viernes a las puertas de Compostilla. Una de las dos centrales, junto a la de Anllares, que se encuentran bajo amenaza de cierre y que ha llevado a los mineros a recrudecer sus protestas.

El secretario general de PSOE en Castilla y León, Luis Tudanca, lanzó una "llamada de socorro" para un sector que necesita "una solución urgente" en lugar de "promesas, gestos y fotografías". Tudanca también señaló que es necesario insistir al Gobierno para que "dé una solución y las cuencas mineras tengan futuro". "Sin la minería las cuencas no podrán sobrevivir" y "queremos que las cuencas tengan presente y futuro", apostilló.