Avilés, Juan C. GALÁN

Roberto Robles Merayo dirigirá al Avilés la próxima temporada. El acuerdo está cerrado, a excepción de unos flecos económicos. Nada que haga peligrar la operación. El próximo lunes el entrenador berciano afincado en Gijón se verá las caras con el máximo accionista de la entidad, José María Tejero, para pulir aristas, y, con probabilidad, será presentado oficialmente a mitad de semana.

La negociación no ha sido complicada. Robles era el candidato favorito del secretario técnico, Ulpiano Cervero. No en vano, la relación entre ambos hunde sus raíces en el tiempo. En el pasado mes de febrero el propio Cervero comenzaba a dejar caer la posibilidad de que Robles ocupara el banquillo del Román Suárez Puerta. Sin embargo, el fuerte carácter de ambos parecía erigirse como una traba para el fichaje del técnico. Las concesiones por parte y parte han disipado el conflicto. Robles aceptará los fichajes que haga el club, aunque tendrá capacidad de decisión. Sin embargo, su concesión principal es la de aceptar tan sólo una temporada de contrato, por las dos que deseaba en un primer momento. Desde el club se aclara que Robles estará automáticamente renovado si el equipo asciende.

El tema económico es el único a aclarar para que el berciano estampe su firma. Sin embargo, las dudas no provienen de los emolumentos a recibir por el propio técnico -en ese aspecto ya existe acuerdo total-, sino en el de sus ayudantes. Robles vendrá acompañado por un preparador físico, cuyo nombre aún no ha trascendido y, con probabilidad, por un entrenador ayudante.

A pesar de que Robles aceptará la plantilla que diseñe el cuerpo técnico del club, en el Real Avilés Industrial esperan que su presencia en el banquillo facilite la adquisición de algún refuerzo. No en vano, Robles ya ha manifestado sus peticiones. Sin dar nombres, el berciano ha solicitado al club un portero, un defensa central y un delantero. La entidad no sólo está de acuerdo, sino que añade la necesidad de contratar a dos centrocampistas, ante la más que probable salida del equipo de Mimi y Rubén.

En el puesto de guardameta podría estar la sorpresa de la temporada. El Avilés ha dejado entrever que repescará a Eneko Loinaz. El meta salió por la puerta de atrás del club con destino al Portuense. La falta de minutos en el equipo gaditano le han inducido a buscar una salida, y el Avilés podría ser su destino.

En el club, ni confirman ni desmienten. «Nos gustaría que Eneko volviera, porque nunca quisimos desprendernos de él. En realidad, sigue perteneciendo al Avilés», señala el máximo accionista, José María Tejero, que avisa: «Si vuelve, es para que sea un jugador de provecho».