Oviedo, PEPETE

Pocas veces en un encuentro de rivalidad como es el Astur-Oviedo de División de Honor juvenil los tres puntos en juego tienen tanta importancia como el de la presente jornada, pues ambos equipos están luchando por mantener la categoría.

Es cierto que el Astur, colista con sólo 11 puntos, está peor que el Oviedo, que suma 16 puntos y que es antepenúltimo, pero no es menos cierto que ambos están con la soga al cuello, pues serán cuatro los equipos que desciendan al final de temporada de División de Honor a la Liga nacional.

El encuentro está programado para el domingo, en el Hermanos Llana, a las 11.45 horas y con arbitraje de Moro Sánchez.

También el domingo tenemos el derbi gijonés entre el TSK Roces y el Sporting, a las 12.30 horas, en Covadonga, y dirigido por González Fuertes.

Los dos equipos están en zona tranquila de la clasificación e incluso tienen posibilidades de entrar en puestos que dan derecho a jugar la Copa del Rey. El TSK Roces está a sólo dos puntos del Sporting, que suma 26, y se puede decir que está realizando muy buenos encuentros esta temporada. Por su parte, el Sporting ha vuelto a la regularidad después de algunos altibajos y ya es quinto en la tabla. Por la tranquilidad con que van a disputar este choque se espera un buen partido.

Liga nacional juvenil. Para mañana, sábado, están programados los encuentros TSK Roces-La Braña, Alcava-Estudiantes, Avilés-Inmaculada y Gijón Industrial-Juventud Estadio. Dentro de estos encuentros destaca el choque TSK Roces-La Braña, principalmente para los visitantes, puesto que son segundos con 31 puntos, al igual que el Alcava, que recibe el domingo a un Estudiantes al que lógicamente debe de vencer. Por lo tanto, se puede decir que la Braña se juega la segunda plaza ante el TSK Roces.

En esta competición hay que elogiar la gran temporada que está realizando el Isastur-Alcázar, que es líder sin conocer la derrota, con 45 puntos, 14 más que La Braña. Es también el máximo goleador, con 43 goles, y el menos batido, con sólo 12 tantos en contra. Cuando estamos en el ecuador de la competición, prácticamente se le puede considerar ascendido a División de Honor.