El ciclista australiano Cadel Evans (BMC) se ha adjudicado la séptima etapa de la 93a. edición del Giro disputada entre Carrara y Montalcino, de 222 kilómetros de recorrido y el kazako Alexandre Vinokourov (Astana) recupera la camiseta rosa de líder dejando claro que se encuentra en un excelente momento de forma.

Tras Evans, en la etapa cruzaron la línea de meta el italiano Damiano Cunego, a dos segundos, el kazako Vinokourov, el italiano Pinotti y el español David Arroyo. El grupo del español Carlos Sastre llegaba a casi cinco minutos y medio

La general tras esta jornada queda con Vinokourov al frente seguido de Evans a 1:12, el escocés David Millar a 1:29 y ruso Vladimir Karpets a 1:30; mientras que Nibali se retrasa ahora 1:32 minutos con respecto al nuevo líder.

Fue una jornada más dura de lo esperado y previa al primer envite serio de la montaña, con final en el temido Monte Terminillo. Muchos kilómetros, viento y lluvia, varios tramos de carretera sin asfalto que pusieron la guinda a una etapa que resultó un tanto épica debido a las diferencias y el estado en que llegaron la totalidad de los corredores "maquillados" en barro.

Desde el comienzo de la carrera, las escapadas fueron un constante y, en ellas, había algún que otro representante de los equipos fuertes, aunque fue en la parte final, la más dura, con esos veinte kilómetros de carreteras sin asfaltar, de tierra, cuando se gestó la escapada buena.

Faltaban unos 57 kilómetros para el final, por medio dos puertos, el Rospatorio (3a.) y el Poggio de Civitella (2a.) a pocos kilómetros de la meta final en Montalcino.

Se formó un grupo con ilustres como el campeón olímpico Evans, a la postre ganador de la etapa, Vinokourov, que recupera la camiseta de líder e invitados como el español David Arroyo, los franceses Gadret y Pinotti y el italiano Garzelli, grupo al que poco después se unió el también italiano Cunego y del mismo se fueron cayendo algunos de los integrantes.

El grupo del líder en la salida Nibali, bien escoltado por su compañero y compatriota Ivan Basso, hacía todo lo posible por reducir diferencias en el tramo embarrado de carretera que conducía a Montalcino, pero sin éxito, lo mismo que le ocurría al español Carlos Sastre que no lograba esquivar los charcos y el barro para acercarse al grupo puntero.

En la parte final, ya en carretera asfaltada, hubo acuerdo entre Evans y Vinokourov para repartirse los laureles, el primero se llevó el triunfo de etapa y el segundo recuperaba la camiseta de líder, dando un primer aviso a otros favoritos para el podio, como el italiano Nibali y el español Carlos Sastre, pues perdieron más tiempo del previsto en una jornada que, a priori, no era muy complicada.

Mañana, se disputará la octava jornada que unirá la localidad de Chianciano con el Monte Terminillo, de 189 kilómetros.