A la hora de hacer esta entrevista, Moisés García Rosa (Sevilla, 31-10-89) tendría que haber estado en el campo de La Fuensanta vigilando de cerca al delantero del Conquense Vinuesa. En cambio, el central sevillano disfruta de sus dos jornadas de descanso y celebra con sus padres y su novia su debut en el primer equipo del Sporting, nada menos que en el Santiago Bernabeu. Moisés, que llegó el pasado verano a Mareo para incorporarse al filial, tiene un año más de contrato.

-¿Qué hace uno el día después de debutar en el primer equipo del Sporting en el Santiago Bernabeu?

No se puede decir que sea un día normal. La verdad es que aún no lo he asimilado del todo. He venido haciendo lo mismo que cualquier otro día, sólo que me he levantado con mucha más ilusión y con una gran alegría. He recibido muchas llamadas y me han hecho algunas entrevistas.

-¿Cuándo supo que iba a jugar?

El mismo sábado por la mañana, cuando Clemente comenzó a dar la charla y dijo el once titular. A mí me citó entre Iván Hernández y Botía y me dijo que iba a ser el que tapara a Higuaín

-¿Tuvo escalofríos?

La verdad es que cuando te dicen algo así te pones un poco nervioso, y a medida que se iba acercando el partido los nervios iban creciendo.

-Clemente le encargó tapar a Higuaín, ¡vaya papeleta para empezar!

Sí, él lo dice y parece fácil. Pero Higuaín es un goleador nato, como se vio el sábado. Al principio estaba un poco nervioso, pero cuando avanzaba el partido me pegué a él como su sombra e iba detrás de él a todos lados.

-¿Le dijo algo?

En una jugada sí que me dijo que lo dejara en paz. Pero eso no era lo que yo tenía pensado. No lo dejé en paz en ningún momento porque quería cumplir lo que dijo el entrenador, que era seguirlo a todas partes.

-¿Qué le dijo Clemente?

Me dijo que había sido un debut muy bueno y que había estado muy bien. Tengo que darle las gracias por la oportunidad que me dio. El único pero fue el gol de Higuaín, en el que pensé que iba a salir Juan Pablo, no nos entendimos. Con estos futbolistas no puedes fallar.

-¿Cuál fue su primera llamada cuando supo que iba a jugar?

A mis padres y a mi novia, se pusieron muy contentos y me aconsejaron que estuviera tranquilo. Yo les dije que tranquilo no se podía estar.

-¿Y ahora qué?

El martes entreno con el primer equipo y luego lo que manden. Si hay que volver al filial, lo haré encantado. Estoy muy agradecido al filial y si jugué el sábado fue gracias a él. Estoy muy ilusionado con poder seguir en el primer equipo.

-¿Con qué se queda del debut?

Con todo, pero sobre todo con el gran apoyo que me dieron mis compañeros. Botía e Iván me aconsejaban y yo les hice caso en todo. Y con el escenario. También con el hecho de verme ahí junto a Gálvez y saber que los chavales del filial estamos teniendo protagonismo gracias a Clemente.