Lejos del bombo y platillo de temporadas anteriores, los fichajes de este año han aterrizado de una forma más discreta. Es la línea a seguir del nuevo Oviedo. Con 350.000 euros se cerró la llegada de once futbolistas que de momento han olvidado plazos de adaptación y excusas de la misma naturaleza que eran habituales en anteriores ediciones.

En el contingente de incorporaciones, la labor de Javi Casares (Jerez de la Frontera, 1984) es de las que más ha destacado. Como un calco de su juego, el extremo se expresa ante los micrófonos de una forma acelerada y ágil. Los tiempos de adaptación no existen cuando el desafío es intenso y el Oviedo es el mejor ejemplo.

-Ganan hasta cuando hacen menos méritos para hacerlo.

-Al comienzo del partido no salimos bien, veníamos de un esfuerzo de 120 minutos de la Copa y acusamos el cansancio. Conseguimos reponernos y en la segunda mitad fue nuestra.

-De momento están logrando convertir el Tartiere en un fortín.

-Si un equipo quiere estar arriba en la tabla tiene que ser fuerte en casa y tratar de arañar lo que pueda fuera, la experiencia me dice que ésa es la línea a seguir. Lo importante es a partir de casa cimentar la temporada.

-¿Qué le ha parecido la afición del Oviedo en lo que ha visto hasta ahora?

-Ya lo he dicho desde el primer día que tuve oportunidad de jugar ante esta afición: la gente es un jugador más. En los malos momentos también nos han apoyado y ante el Alcalá se vio el mejor ejemplo: nos aclamaron aunque sufriéramos y lo acabamos notando.

-La próxima cita es en El Helmántico, un rival con nombre en esta categoría.

-Por nombre y campo parece un equipo de otra categoría pero no sólo eso. Además cuentan con muy futbolistas de mucha calidad. Han montado un buen equipo, muy competitivo, aunque parezca que los problemas fuera del campo puedan afectarles. Será un partido muy difícil, ellos estarán arriba al final de temporada, no sólo por institución sino por equipo.

-¿Que tengan problemas económicos les puede debilitar?

-No se está reflejando en los partidos, están sacando buenos resultados, sólo hay que ver que llevan los mismos puntos que nosotros en la tabla. Será complicado. El Salamanca sabe que algunos de sus problemas quedarían resueltos con el ascenso.

-Usted vivió situaciones convulsas anteriormente. ¿Afecta tanto a los futbolistas?

-Siempre afecta. Las personas que tienen una familia que mantener lo notan. Llegar a final de mes y no tener lo suficiente para cubrir las hipotecas puede hacerse duro. También para los futbolistas. La única solución es desconectar de los problemas en los entrenamientos y en los partidos. Hay que ser muy profesional para que no te afecte.

-Muchos se han sorprendido con su rápida aclimatación al Oviedo.

-La adaptación te la facilita el grupo. Desde el primer día me han acogido como a uno más y si me he adaptado así de bien desde el primer partido en gran medida se lo debo a ellos.

-Tampoco parece acusar la inactividad del verano.

-En pretemporada no me he saltado ningún entrenamiento con el Alavés y no había perdido la forma del todo, como cuando dejas de ejercitarte. El único aspecto negativo es que no había disputado partidos amistosos pero en el aspecto físico me he encontrado bien desde el principio.

-Ya ha anotado dos goles (uno en Copa y otro en Liga). ¿Puede contar con usted el Oviedo para el papel de goleador?

-No me gusta marcarme una cifra de goles a conseguir, eso lo dejo para los delanteros. Soy un futbolista más de dar goles que de meterlos, pero si puedo ayudar en este aspecto estaré encantado.