La ovetense Ángela Salvadores ha sido una de las sensaciones del Mundial de baloncesto femenino sub-17 celebrado en la República Checa. La alero, nacida en la capital del principado de Asturias, logró el trofeo de MVP (jugadora más valiosa) del torneo y de la final, donde anotó la cifra de 40 puntos. La selección caía en la final el domingo ante Estados Unidos (77-75), tras plantar cara al equipo favorito del torneo."Lo cambiaría todo por el oro", asegura Ángela.

"Hoy (por ayer) estoy mejor, aunque no bien del todo", decía la jugadora, quien pese a su buena actuación individual asegura que "si pierdes el partido, todo da igual", en declaraciones a LA NUEVA ESPAÑA.

La jugadora del momento lleva el baloncesto en los genes. Su madre, Geli Álvarez, ovetense, fue jugadora del Auseva. Al término de sus estudios en el colegio, formó parte del CAU. Fue en la Universidad de Oviedo cuando conoció a Jorge Salvadores, quien llegaba a la capital asturiana para jugar como becado. Jorge, nacido en León, fue jugador semiprofesional que formó parte de las filas de CAU y Tradehi Oviedo, donde compartió vestuario con Campoamor, entre otros.

"Siempre reivindicamos que Ángela es asturiana", asegura Geli, al igual que sus hermanos. Geli y Jorge se mudaron a León tras nacer Ángela. Allí la estrella emergente del baloncesto femenino nacional comenzó a dar sus primeros pasos. Sin embargo, Ángela Salvadores asegura conocer Oviedo a la perfección, además de Tapia de Casariego, lugar donde veranea.

Tanto Jorge como Geli se mostraban alucinados por el gran partido de su hija. "Incluso nos llegábamos a preguntar si había tenido opción a anotar tantos puntos a lo largo del choque", dice su madre. Sí que tuvo, concretamente 40 puntos, 4 rebotes y 3 asistencias para firmar 31 puntos de valoración. Ambos presenciaron la final en la localidad checa de Pilsen. La jugada polémica que condenó a la selección española llegó a falta de siete segundos para el final.España tenía posesión para ponerse un punto por debajo en el marcador. Sin embargo, el lanzamiento de Maite Cazorla era anulado por los árbitros por una falta en el bloqueo. "Solamente celebré la canasta, ya que no vi la jugada porque me había tocado dar el pase", dice Ángela. Su madre tampoco le encuentra explicación: "los árbitros no deberían señalar esa falta en ataque con tan poco tiempo por jugarse".

La asturiana lograba batir una serie de récords, como el de mayor anotación de una jugadora de baloncesto de la selección española, anteriormente en manos de Amaya Valdemoro. Ángela Salvadores se concentra a partir de esta semana con la selección sub-18 para asaltar el Europeo de Portugal, a partir del 17 de este mes.