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Asturias brilla en Oro

El Unión Financiera vive su mejor racha y disfruta de la explosión del gijonés Fernández Noval

Un mate de Fernando Fernández Noval en el partido ante el Planasa Navarra. HUGO ÁLVAREZ / OCB

"Un partido de gracia lo tiene cualquiera", bromea Fernando Fernández Noval al ser preguntado por su gran actuación del domingo en la victoria (72-74) del Unión Financiera en la cancha del Força Lleida. El ala-pívot asturiano anotó 21 puntos y su acierto resultó fundamental para que el equipo ovetense sumara su quinta victoria consecutiva. La mejor racha del Unión Financiera en las tres temporadas que lleva en la LEB Oro.

Fernández Noval disfrutaba ayer de un día de descanso tras el eterno viaje de vuelta de Lérida. Un alto en el camino antes de preparar el partidazo que afrontarán el sábado (20 horas) en Pumarín. Ese día visita Oviedo un Palencia que es líder y que encadena seis triunfos consecutivos. Se miden las dos mejores rachas de la categoría. "Espero que esté Pumarín a reventar. Viene el líder a enfrentarse contra el segundo. Alicientes no van a faltar", dice Fernández Noval, que jugó unos meses en el Palencia.

Y es que el ala-pívot gijonés, de 26 años, cuenta con una dilata trayectoria. Tras pasar cuatro años estudiando en Estados Unidos, fichó por el Palencia, de LEB Oro, donde apenas jugó. Ese mismo año probó en Plata, en el Araberri, pero la cosa tampoco cuajó y terminó en el Universidad de Oviedo, de Liga EBA, y entrenando precisamente con el Oviedo Baloncesto, entonces en LEB Plata. Un año en Murcia, en EBA, y dos en LEB Plata, uno en Ávila y el pasado en Cáceres, donde consiguió el ascenso, le sirvieron para que el Unión Financiera volviera a fijarse en él y le diera la oportunidad de jugar de nuevo en Oro.

"Estoy muy contento de que hayan querido contar conmigo para la LEB Oro. Es la primera vez que tengo minutos e importancia en la categoría", explica el ala-pívot. Y además, tras tantos años fuera, agradece volver a casa: "Ya no me acordaba de lo bien que se vive en Asturias". En Oviedo comparte piso con Javi Marín, al que le toca levantar el ánimo en una temporada en la que al joven escolta zaragozano las lesiones no le están dando respiro. También disfruta de compartir equipo con un ídolo de su niñez, Diego Sánchez, al que considera "un ejemplo".

La temporada difícilmente podía irle mejor al equipo, "el bache en Clavijo nos hizo espabilar", analiza Fernández Noval. En Oviedo se ha encontrado con una afición que no deja de sorprenderle: "Mira que llevo años jugando fuera, pero la afición de Pumarín es la mejor que me ha tocado como local. No me gustaría jugar con Pumarín en contra", añade. En Oviedo, Fernando y Diego tratan de mantener vivo el baloncesto asturiano. Ellos, junto a Saúl Blanco, son los únicos profesionales de la región. Su ejemplo debe servir para que en el futuro haya más.

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