José Manuel Navarro Iglesias constata un crecimiento de la práctica del nihon taijitsu en Asturias, un arte marcial de puramente defensa personal. "Pese a que no es muy conocido, las expectativas son buenas", asegura Navarro Iglesias, que acaba de regresar a Asturias tras participar en el congreso de la Federación Mundial, en París.

Navarro Iglesias señala que "el nivel en Asturias es excelente, y es una disciplina que cada vez gusta más, aunque la crisis se ha notado, pero hay mucha gente veterana muy interesada y que además trabaja de maravilla".

Maestro sexto dan, Navarro Iglesias no es el primero que consigue en Asturias tal grado, como por error informábamos ayer, sino que tal categoría la alcanzó primero Darío Dossío, de Mieres, que no pudo asistir al congreso internacional. Navarro fue por tanto el único asturiano presente en la cita internacional, con intensas sesiones de trabajo y en las que se aprobaron nuevas katas, que los participantes se comprometieron a difundir en sus respectivos ámbitos.

Navarro, que lleva treinta años trabajando el nihon taijitsu, manifestó ayer su pesar por el fallecimiento de un veterano maestro francés, Raymond Jugeau, a los 85 años, uno de los grandes referentes mundiales de este arte marcial.