El derbi comarcal entre Real Avilés y Marino de Luanco llega cargado de alicientes, sobre todo para los gozoniegos, que acaban de acceder el pasado domingo a la única plaza que queda libre para el play-off y tienen que pelear por mantenerla. El Avilés afronta el partido con la tranquilidad de que ya ha hecho los deberes, aunque la derrota de la semana pasada ante el Urraca, que dio al traste con las posibilidades de lograr el campeonato, es un impulso más para no fallar ante el rival de proximidad.

El Marino, por tanto, se juega más, pero no ha querido ni mencionarlo durante la semana. El equipo comenzó la campaña con la idea de luchar por el título y hace unas semanas pocos confiaban en que pudiera llegar a luchar por estar entre los cuatro primeros. El conjunto que dirige Blas García ha decidido no lanzar las campanas al vuelo y continuar con la filosofía que le ha llevado a los puestos de privilegio, el partido a partido. Y el de hoy no va a ser uno fácil.

El Real Avilés afronta el choque casi como una preparación para el play-off. El equipo blanquiazul pelea con el Langreo por la segunda posición, pero el técnico apenas da importancia a ser segundo o tercero. Da por seguro que tocará jugar tres eliminatorias y lo que busca el cuerpo técnico y el equipo es llegar en la mejor forma posible. Ese el reto para el Avilés hoy, hacer frente al que, en palabras de Pablo Lago, es uno de los mejores equipos de la categoría. De paso, el técnico ya insinuó que los jugadores se tienen que comenzar a ganar su sitio en los partidos definitivos y el choque de hoy es una buena piedra de toque para convencerlo.

Por si fuera poco, el de hoy en el Suárez Puerta, es uno de esos partidos en los que hay muchos antiguos amigos en el campo y tanto Pablo Lago como Blas García insistieron en que el partido es especial, de hecho trece jugadores entre las dos plantillas tienen pasado en el equipo que hoy será su rival. En el caso de Omar Sampedro, Geni, Dani López, Davo y Dani Laviana, regresan al Suárez Puerta después de haber jugado allí como locales al menos el año pasado.

Para afrontar el derbi, el técnico Pablo Lago recupera a Jorge Rodríguez, que cumplió sanción ante el Urraca, y también ha convocado a Marcos Torres, que está en la recta final de su recuperación, aunque es probable que no lo fuerce para contar con él al cien por cien más adelante. El entrenador tiene disponibles a todos sus jugadores y puede haber cambios en el once. La vuelta de Jorge Rodríguez puede traer consigo el regreso de Álex García para acompañarle en las posiciones más ofensivas. Otra variante con respecto a los últimos partidos puede llegar en la defensa, ya que el técnico puede mandar a Fidalgo a la posición de carrilero derecho y colocar en la defensa de tres a Otero o Nacho Fernández.

Así, el técnico podría optar por colocar a Guillermo en la portería; Borja Noval, Pantiga y Nacho Fernández en defensa con Fidalgo y Óscar Ruiz como carrileros; Jorge Sáez, Dudi y Nacho Méndez, en el centro del campo, y Álex García y Jorge Rodríguez arriba.

Poco quiere tocar, por su parte, el técnico del Marino. Davo en la portería; Pablo Suárez, Espolita, Samuel o Boris (que sería el único cambio en el equipo titular) y Guaya, en defensa; Roberto Suárez y Pablo Hernández, en el centro del campo con Capelete en la derecha y Dani López en la izquierda; Geni en la media punta y Omar Sampedro arriba. En el resto de convocados la novedad es la vuelta de José Ángel a la lista en detrimento de Borja Fanjul. Dani Laviana, Ricky y Góngora, completan la convocatoria.