La dos últimas derrotas de esta semana ante el Sporting B en la final de la Copa Federación (3-1) y frente al Marino en Liga (1-0) en Miramar hicieron mella en el Avilés. El equipo no dejó buenas sensaciones en Luanco y los técnicos analizaron ayer la situación con la plantilla en el vestuario durante más de una hora.
El técnico, Pablo Lago, explicó al final de la reunión que "es momento de tratar muchos temas y hay que ir buscando soluciones". Y añadió: "Tampoco queremos darle muchas vueltas porque el martes pasado estábamos líderes y ante una bonita final de la Copa Federación y sólo pasó una semana. Ni antes éramos tan buenos ni ahora tan malos, somos los mismos y hay que quedarse con las ganas de trabajar y seguir corrigiendo muchas situaciones".
Lago aseguró que hay "mucha confianza" en el grupo a nivel deportivo para superar las dudas. "Puede salir un partido malo, pero el equipo va a empujar este año y va a estar muy fuerte". El técnico, no obstante, asume que llegarán "momentos menos buenos" a lo largo de la temporada que habrá que superar. " Hay que estar preparados para levantarse lo más rápido posible porque ese es el secreto para hacer una temporada regular buena", señaló.
El entrenador blanquiazul hizo un análisis rápido de las tres derrotas que encajó el equipo en el último mes. "En Langreo no estuvimos acertados cara al gol, pero el equipo compitió muy bien y probablemente despachó el mejor partido de la temporada; con el Sporting B en la Copa al quedarnos con uno menos en el minuto 12 con 2-0 fue complicado aunque el equipo dio el nivel con uno menos y estuvo bien; y el de Miramar fue el peor partido y el que dejó peores sensaciones porque, al no marcar, pagamos caros los fallos cometidos".
Lo último que queda es la derrota en Luanco y el técnico asume que el equipo "no hizo un buen partido", pero reafirma su confianza en unos jugadores que, recordó, "nos han demostrado que se puede confiar en ellos después de un buen inicio de Liga y estamos con ellos a muerte porque seguro que llegarán los buenos resultados".
El derbi de Miramar se resolvió con una jugada de estrategia calcada a la que costó la derrota en Ganzábal ante el Langreo. "Lo diferente en Miramar es que estábamos con uno menos pero son jugadas que nos hacen daño", asume Lago. "El del Marino quizás fue el partido en el que más espesos estuvimos desde que empezó la temporada. Tras la expulsión de Nuño y el gol lo intentamos y expusimos, pero nos costó crear ocasiones porque el Marino se defiende muy bien al contar con gente con experiencia y muy competitiva en la categoría".
Y la expulsión de Nuño también fue contestada por Lago. "Es totalmente injusta porque ahora los agarrones que no son de cara a portería ni ocasión de gol no son tarjeta. Así se dejó claro en las reuniones de principios de año, pero a nosotros se nos pita".
El mes más difícil. El Avilés afronta su mes más complicado con partidos ante los mejores de la tabla. Y es que después del Marino llegan el Oviedo B, Covadonga (en Oviedo), Llanes y Sporting B en Mareo. "Es un calendario duro en un momento importante porque son partidos contra rivales directos que si se ganan fortalecen mucho el trabajo del grupo, pero ahora sólo hay que pensar en ganar al Oviedo B y luego ir trabajando cada partido porque la temporada es muy larga", dice Lago.
Un problema añadido son las lesiones que están sufriendo hombres importantes, como Palazuelos o Marcos Torres, pero Lago resta importancia a las ausencias. "Las bajas llegan más tarde o más temprano y hay gente que está con muchas ganas de jugar y preparada para suplirlas y competir muy bien", concluyó.
