Atenas / Berlín,

Agencias

El representante de Grecia ante el Fondo Monetario Internacional (FMI), Panagiotis Roumeliotis, aseveró ayer que el país necesitará casi con toda probabilidad una ampliación del segundo plan de rescate estipulado, o bien iniciar un proceso de reestructuración de deuda para cubrir sus necesidades de financiación, habida cuenta de los graves efectos de la recesión económica, que han resultado ser «peores de lo esperado».

En cambio, miembros del grupo de expertos que examinan los ajustes de Grecia para seguir recibiendo asistencia financiera han criticado la falta de determinación de Atenas para aplicar los recortes, según avanzó ayer el diario alemán «Welt am Sonntag». En un artículo que publicará mañana, miembros de la troika compuesta por el FMI, la Comisión Europea (CE) y el Banco Central Europeo (BCE) critican abiertamente al Gobierno heleno antes de concluir su último informe.

El responsable de la delegación del FMI en Grecia, el danés Poul Mathias Thomsen, considera que Atenas debe implementar ajustes mucho más severos que los que ya ha ejecutado.

«Está claro que el programa no saldrá adelante si las autoridades no se deciden por el camino de unas reformas estructurales mucho más estrictas de lo que hemos visto hasta ahora», afirmó Thomsen, quien añadió: «Grecia está en la encrucijada».