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La degradación de los comportamientos económicos afecta a amplios sectores sociales

La creencia de que la corrupción en la economía española se limita al ámbito político carece de sustento empírico. En este momento están procesados, encarcelados o bajo proceso de investigación por supuestos delitos económicos, empresarios y dirigentes y exdirigentes de organizaciones patronales, directivos de empresas, expresidentes de clubs de fútbol, tonadilleras, sopranos, cantantes de pop y deportistas, decenas de funcionarios y una amplia gama de ciudadanos de toda suerte y condición.

El reduccionismo de que la corrupción en España es sólo de los políticos no se verifica con los hechos y tampoco permitiría explicar por sí mismo que España sea el 40º país, de 177 estudiados, con mayor percepción de corrupción, según Transparencia Internacional. La corrupción es un fenómeno social que aumenta cuanta más tolerancia tenga entre la ciudadanía.

Los españoles lideran las estadísticas de piratería informática. El 68% de los libros que se descargan en Internet se obtienen de forma irregular (dato del gremio de editores) y lo mismo el 84% de todos los contenidos digitales consumidos en el país, según la consultora GFK, lo que supone un fraude de 16.136 millones. El 70% de las pequeñas y medianas empresas española usan "software" ilegal, según la consultora IDC. Sólo Grecia, Chipre, Italia, Islandia, Malta y Portugal superan a España.

Según el profesor Roberto Velasco, de la Universidad del País Vasco, las empresas españolas son, después de las chinas, las que más recurren al soborno para crecer en el extranjero. Y una encuesta realizada por LEY acaba de concluir que el 36% de los altos directivos españoles admitieron que están dispuestos a sobornar para hacer negocios.

Las dimisiones de un ministro alemán por plagiar párrafos de un libro carecen de equivalencia en España, donde es práctica cotidiana y donde algún personaje público famoso sigue gozando de enorme prestigio aun después de descubrirse que había firmado como propio un libro plagiado a otro autor.

Una encuesta en 2007 del Instituto de Estudios Fiscales concluyó que el 47% de los españoles justifica el fraude. Algunos deportistas de élite fueron ovacionados a su llegada a los juzgados para declarar por supuesto delito fiscal. El profesor Ariol Amat afirmó en abril que el 30% de quienes cobran el paro en España trabajan al tiempo de forma ilegal. Y sobre las pensiones de invalidez, el presidente de CEOE, Juan Rosell, dijo en julio: "No puede ser verdad que en España haya 850.000 inválidos".

En 2007, en plena efervescencia del "milagro español", España, que supone el 12% de la eurozona, concentraba el 36% de todos los billetes de 200 y 500 euros en circulación. Un estudio que acaba de difundir Checkpoint sitúa a España como el segundo país europeo con más hurtos en los comercios.

Todo ello ejemplifica que la lucha contra la corrupción exige un rearme moral de toda la sociedad.

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