La Corriente Sindical de Izquierda (CSI), sindicato mayoritario en las oficinas de Liberbank en Asturias, califica como un "chantaje intolerable" la oferta presentada por la dirección del grupo, "al incluir la amenaza de despidos" en caso de no cumplir el objetivo de recorte de personal de 979 trabajadores, 171 de ellos en el Principado.

El nuevo plan de reducción de empleo del grupo, integrado por Cajastur, Banco CCM, Caja Cantabria y Extremadura, contempla que los empleados nacidos entre 1959-1960 podrán acogerse a bajas voluntarias de manera progresiva en lo que queda de año y 2017, lo que permitirá la salida de unos 395 trabajadores, precisa la organización sindical en un comunicado.

Añade que a los 584 empleados restantes se les propone marcharse con 30 días de salario y un tope de 20 mensualidades, hasta un máximo de 120.000 euros.

"No se nos hizo entrega de ninguna documentación que acreditara la necesidad de este ajuste, ni se aportaron datos sobre los cierres y las transformaciones que se están desarrollando en servicios centrales y oficinas", precisa CSI.

En el caso de Asturias, el sindicato agrega que el plan piloto de cambios en oficinas, desarrollado en Avilés, está "demostrando sobradamente que lo que busca la dirección de Liberbank es el desguace y la liquidación de lo que fue Cajastur.