C. JIMÉNEZ

Consuelo Fernández Llavona es la gerente de Biozell Diagnóstico Molecular, S. L., empresa especializada en la elaboración y desarrollo de pruebas de ADN con sede en el Parque Científico Tecnológico desde 2002. En una oficina de alquiler situada en los bajos del edificio principal dos jóvenes biólogas trabajan en la realización de los diagnósticos. Fernández Llavona cree que las nuevas tecnologías supondrán un cambio cualitativo en su trabajo. En el laboratorio de Biozell distribuyen su tiempo entre las pruebas genéticas y la investigación. La última, apoyada por la Universidad de Oviedo, fue sobre el virus del papiloma humano. En proyecto está una iniciativa de genotipado de Pneumococo. Es la última novedad de un laboratorio al que se le abren grandes perspectivas con la miniaturalización creciente de los procesos, según defiende la gerente.

-¿Por qué eligieron como sede para el laboratorio el Parque Tecnológico?

-Por las grandes facilidades para la instalación inicial, las posibilidades de disponer de un local acorde con nuestras necesidades y por las buenas comunicaciones que ofrece este enclave.

-¿Qué ventajas les ha reportado este espacio para su empresa?

-Aparte de las indicadas anteriormente, las infraestructuras propias del Parque y el entorno humano nos han facilitado mucho nuestra actividad.

-¿Cuál es la relación entre la biología y el negocio de las empresas TIC?

-Cada vez existe un vínculo más estrecho. Como ejemplo, nosotros utilizamos bases de datos genéticas y programas informáticos para diseñar pruebas biológicas.

-¿Qué aplicaciones tienen las nuevas tecnologías en el campo de la biología y la genética?

-Para nosotros son innumerables. Cada vez que nace una nueva técnica, hay un buen número de investigadores intentando sacarle partido y aplicarla al campo de la biología molecular, destinada al diagnóstico y tratamiento de enfermedades.

-¿Creen que lo digital acabará por comerse el universo físico?

-La información digital y los sistemas electrónicos se utilizan para realizar automáticamente tareas que antes precisaban de mucho trabajo manual. En muchos casos, el operario no toca el material que se procesa. Por otro lado, la miniaturalización creciente de procesos (nanotecnología) llevará en un futuro a la creación de dispositivos capaces de realizar tareas más complejas que ahora necesitan de un laboratorio.

-¿Cuál fue su mayor dificultad en el momento de abrir la empresa?

-Sobre todo, la burocracia fue lo que más tiempo consumió cuando iniciamos el proyecto.

-¿Dónde se encuentran sus principales nichos de negocio?

-Principalmente trabajamos en laboratorios de análisis clínicos, con farmacias y también con particulares, que son muchos.

-¿Cuál ha sido el lugar más recóndito de donde han llegado peticiones para realizar pruebas de diagnóstico molecular?

-Quizá desde Brasil, desde donde nos enviaron unas muestras de ADN para realizar una prueba de paternidad.

-¿Y la petición más extraña que han recibido?

-Los particulares nos envían habitualmente todo tipo de muestras para realizar las pruebas de paternidad, desde tetinas de biberón a tiritas con restos de sangre... pero no todas son válidas. Queremos acercar a la población el kit para la toma de muestras en casa.

-¿Quiere eso decir que en adelante se podrán realizar las pruebas en casa, sin necesidad de acudir al laboratorio?

-No, lo que queremos hacer es introducir el equipo para la toma de muestras en las pruebas de paternidad de las farmacias. Es nuestro objetivo más inmediato. Queremos llevarlo a todas las farmacias de Asturias. La idea es que puedan tener acceso fácil al material para recoger las muestras, pero el proceso posterior de análisis se mantendrá como hasta ahora.

-¿La investigación forma parte también de su área de actividad?

-Sí. Es una iniciativa paralela a la actividad habitual de diagnóstico molecular. En el año 2006 se publicó una investigación realizada en nuestros laboratorios sobre la detección del virus del papiloma humano. El proyecto se hizo en colaboración con la Universidad de Oviedo. En función del trabajo que tengamos en pruebas de ADN queremos seguir manteniendo abierta la línea de investigación en años sucesivos.

-¿Qué proyectos tienen entre manos en esta área?

-De momento, estamos a la expectativa de ver cómo evoluciona el sector para ampliar este año a nuevas iniciativas de investigación. En proyecto tenemos una investigación de genotipado de Pneumococo, a caballo entre la biomedicina y el área de genética humana. En este momento están iniciándose las pruebas en el laboratorio. El volumen de trabajo en pruebas genéticas, principalmente las de paternidad, nos limita en este aspecto, y no se puede dedicar mucho tiempo a investigación, pero queremos seguir trabajando en este campo.