La Consejería de Medio Ambiente Ordenación del Territorio e Infraestructuras dio ayer publicidad, a través del BOPA, a la resolución por la cual se concreta que el proyecto de una industria extractiva (cantera) ubicada en el barrio de Arroyo, en La Pedrera, y que está promovido por el Ayuntamiento de Gijón, debe someterse al procedimiento reglado de evaluación de impacto ambiental. Ese estudio, como es preceptivo, debe contener una serie de justificaciones, descripciones y evaluaciones de efectos previsibles, teniendo en cuenta además las aportaciones hechas por la Confederación Hidrográfica, la Coordinadora Ecologista y la Dirección de Carreteras, entre otros organismos, en el período previo de consultas. La Confederación fue la entidad que más consideraciones hizo al proyecto municipal, para que entre otras cosas incluyan en su estudio adónde irán los materiales de desecho y cómo se evitará el arrastre de finos en las escombreras que se generen.