El vuelco de una furgoneta Volkswagen se saldó ayer a primera hora de la tarde milagrosamente con sólo un herido leve que tuvo que ser trasladado al Hospital de Cabueñes, tras dar el vehículo varias vueltas de campana en la autovía del Cantábrico (A8) a la altura de Tremañes, en sentido a Galicia.

Al parecer el conductor de la furgoneta, matrícula 7460 FHV, conducía bajo la influencia del alcohol y perdió el control del vehículo, dando cuatro vueltas de campana y quedando empotrado contra el quitamiedos de la cuneta derecha. En la maniobra chocó contra un Opel Astra en el que viajaban cinco personas, dos adultos y tres chicas.

No hubo que lamentar daños personales de consideración, aunque los materiales sí fueron cuantiosos. La furgoneta quedó completamente plegada en su parte trasera, llegando a arrancar incluso la puerta corredera, que salió despedida.

Por otra parte, pasado el mediodía se registró otro accidente sin heridos en el túnel de salida de El Llano hacia la Autovía Minera, en sentido a Pola de Siero. Un vehículo que circulaba por el túnel perdió el control y se estrelló a la salida, arrancando parte de las chapas de recubrimiento del pasadizo.

El suceso se saldó sin heridos, pero ocasionó importantes retenciones, que llegaron hasta el cruce con la Avenida de Gaspar García Laviana. El túnel tuvo que ser cortado para retirar el vehículo siniestrado, que quedó atravesado en la calzada.