"Te queda mal cuerpo porque esas cosas son muy desagradables. Eso sólo lo hace un desalmado. Ni siquiera era muy tarde, fue justo cuando se lanzaron los fuegos artificiales y comenzaron a las doce de la noche". José Ramón Suárez, presidente de la sociedad de festejos de Castiello, lamentó ayer la agresión sexual sufrida por una menor la noche de más afluencia en los festejos de San Pedro, la de la madrugada del domingo. Una joven, de 15 años, denunció a la Guardia Civil que había sido objeto de tocamientos por encima de la ropa por parte de un desconocido, cuando se encontraba sola -a la fiesta fue con un grupo de amigos- en la zona por detrás de los coches de choque. Recibió asistencia de los agentes de la Guardia Civil y también por parte de los sanitarios desplazados a la fiesta, ya que por primera vez la comisión de festejos había contratado los servicios de una ambulancia daba la masiva afluencia de público y los casos de comas etílicos que han venido enturbiando la fiesta en los últimos años, sobre todo fruto del "botellón" que no se cansan de denunciar los organizadores. "Esto no podemos decir que tuviera que ver con el 'botellón' pero tengo claro que si el Ayuntamiento nos ayudara más a acabar con esta lacra podríamos controlar mejor otras cosas, quizá como la presencia de estos otros desalmados", sostiene Suárez.