La investigación policial por los disturbios generados el pasado sábado, con motivo del derbi asturiano entre el Real Sporting de Gijón y el Real Oviedo, se da por concluida y no se esperan más detenciones, en principio, después de los doce radicales arrestados en los últimos días, la mayoría de ellos pertenecientes a la peña Ultra Boys. Los investigadores están tramitando las diligencias pertinentes con los detenidos, que pasarán a disposición judicial o bien a lo largo del día o bien mañana miércoles. No obstante, a lo largo de las tomas de declaración se podría determinar la puesta en libertad de algún arrestado.
Los arrestos de los primeros implicados, pertenecientes al grupo Ultra Boys en su mayoría, se produjeron después del derbi asturiano y en diferentes localidades de la región e incluso fuera de ella. La Policía descartó realizar las detenciones "in situ", el día del partido, ante los momentos de tensión que vivieron los agentes frente a los seguidores más radicales del Sporting, que la emprendieron a golpes y comenzaron a lanzar botellas de cristal, vasos, latas e incluso vallas publicitarias, bengalas y sillas contra el dispositivo policial desplegado en la zona. También fue necesario el visionado de fotografías y vídeos del altercadopara el reconocimiento fidedigno de los implicados. Además, en estas ocasiones, no es recomendable realizar los arrestos en el momento con el objetivo de evitar caldear el ambiente y poner aún más en riesgo la integridad de los agentes.
Fruto del lanzamiento de objetos resultaron heridos ocho agentes de la Policía Nacional, de diferente consideración. La mayoría de ellos sufrieron lesiones por las quemaduras provocadas por las bengalas empleadas en la recepción del Sporting -uno de los agentes tiene el rostro quemado- y otros por el impacto de diferentes objetos lanzados por los aficionados radicales que hasta motivaron la caída al suelo de algún funcionario. El uso de la indumentaria habitual en estos casos, como los cascos de seguridad que les protegen el rostro y la cabeza, evitaron lesiones de mayor alcance tras "el ataque salvaje" que sufrieron.
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El dispositivo montado con motivo del derbi suscitó las críticas del sindicato Alternativa Sindical de Policía (ASP), que ayer mostró su malestar por los graves altercados provocados antes del inicio del partido entre el Real Sporting y el Real Oviedo en El Molinón. Altercados generados por "el caos de un dispositivo policial mal gestionado y evidentemente escaso que puso en grave riesgo a varios compañeros". Unas críticas que focalizan en el Jefe de las Unidades de Intervención Policial (UIP).
Por otra parte, la peña Ultra Boys, criticaron que la actuación policial fue "totalmente desmedida y fuera de lugar". La versión de los hechos que ofrecen desde Ultra Boys es que "estábamos recibiendo a nuestro equipo, celebrando que había derbi". "Esa era nuestra única consigna, recibirles e irnos al campo a ver al partido y animar a nuestro equipo", sostiene José Quiroga, portavoz del colectivo, hasta que comenzó el enfrentamiento contra la policía, un enfrentamiento que ocurre según ellos porque "los agentes empiezan a cargar contra la gente".
