El Tribunal Superior de Justicia de Asturias ha ratificado casi en su totalidad la pena impuesta a cinco hombres condenados por participar en una trama delictiva que introducía drogas -de las que causan grave daño a la salud- en la región y que fue descubierta por la Guardia Civil bajo el nombre de "operación Tortellini".

Fueron condenados por la sección octava a 36 años de cárcel por un delito contra la salud pública y absueltos del cargo de participación en grupo criminal. Luego, presentaron recurso de casación ante el TSJA aduciendo ilegalidad de las escuchas, lesión de tutela judicial o adicciones, entre otros argumentos. Todos desechados. No obstante, sí rebaja un año de cárcel a uno de ellos porque su participación en la trama delictiva fue aparentemente menor.

La denominada "operación Tortellini" se remonta al mes de noviembre de 2015, cuando agentes de la Guardia Civil comenzaron el operativo de seguimiento a los encausados por su supuesta relación con una red de tráfico de estupefacientes en el concejo que traían desde la capital. A lo largo de los meses la Benemérita pudo probar cómo efectivamente, todos los condenados -cinco hombres- se dedicaban al tráfico de drogas, unas sustancias que compraban en la Comunidad de Madrid para, posteriormente, venderlas en Gijón. El transporte de los estupefacientes se hacía por carretera, en vehículos que, aunque la investigación apuntaba a que eran especialmente modificados en un taller de León, ese extremo el juez no lo dio por bueno al absolver del delito a los dueños del taller. En la sentencia se entiende probado que todos los condenados habían “concertado” la llegada de la cocaína a Gijón. Unas sustancias de las que se incautó la Benemérita en las sucesivas detenciones que llevó a cabo, principalmente una producida en el peaje del Huerna, donde se localizaron más de cinco kilogramos de cocaína.

Esta sustancia, junto con las que se encontraron en los domicilios de los acusados en sucesivos registros, se podría haber convertido en más de 80.000 dosis de cocaína en la calle. En el juicio celebrado en la sección octava de la Audiencia Provincial el pasado mes de junio y del que ahora se conoce la sentencia, los acusados habían asegurado que se conocían “de ir al gimnasio y pasear al perro”. Ahora el Tribunal Superior de Justicia de Aasturias (TSJA) sólo ha restado un año a uno de ellos manteniendo las penas económicas, que van desde los 500.000 euros a los 300.000 euros.