Campo de Caso, L. M. D.
Un vecino del concejo de Caso ha aceptado ser condenado a pagar una multa de 1.680 euros por colocar dos lazos de acero dentro del parque natural de Redes. En uno de ellos murió un jabalí hembra. Además de la multa, este furtivo ha sido condenado a pagar una indemnización de 300 euros a la Consejería de Agroganadería y Recursos Autóctonos del Principado, así como a la inhabilitación especial para el ejercicio del derecho a cazar por un periodo de dos años.
La Fiscalía del Principado de Asturias informó ayer de que el juicio que iba a celebrarse en el Juzgado de lo Penal de Langreo en relación a la colocación de lazos ilegales en el parque natural no llegó a celebrarse al «reconocer los hechos» el acusado. Los hechos sucedieron el 2 de marzo de 2012, cuando guardas del parque localizaron en la zona conocida como Campa del Río, en Caso, dos lazos de acero. En uno de ellos había caído un ejemplar de hembra de jabalí, que estaba muerta por estrangulamiento.
Los lazos, según se explicó desde la Fiscalía del Principado, se habían colocado «estratégicamente» en zonas de paso de animales, con la intención de «darles caza». El Ministerio Público recuerda que este tipo de métodos de caza no selectiva están «expresamente prohibidas por la normativa de la Unión Europea» y por la reglamentación nacional.
El ejemplar de jabalí que murió en la trampa del vecino de Caso fue valorado pericialmente en un total de 300 euros. A esta indemnización, que debe pagarse al Principado, el acusado admitió haber cometido «un delito contra la fauna» (artículo 336 del Código Penal), por lo que se le impuso una multa de 1.680 euros y se le inhabilitó para la práctica de la caza por un periodo de dos años. Las costas del proceso judicial también recaerán íntegramente sobre el acusado.
Este caso de furtivismo utilizando lazos no es el único que se denunció el año pasado en el parque natural de Redes. En el mes de agosto miembros de la guardería sorprendieron a otro vecino de Caso descuartizando un jabalí que había quedado atrapado en un lazo. El suceso se produjo el 23 de agosto, y cuatro días después la Guardia Civil procedió al arresto del vecino, sobre el que pesa una acusación de un delito contra la fauna.
