Los estrenos de Christopher Nolan son siempre un acontecimiento y Dunkerque no iba a ser menos. Después de su asombrosa odisea Interstellar (2014), cerradas sus sombrías miradas a El caballero oscuro y alejado de las pomposas circunstancias de Origen, Nolan depura su estilo al máximo para contrar desde distintos puntos de vista la "Operación Dinamo". Es decir: el rescate de 300.000 soldados belgas, franceses y británicos rodeados y hostigados por el ejército alemán a finales de mayo de 1940 en una playa francesa, y en el que tomaron todo tipo de embarcaciones con gran presencia de civiles. Winston Churchill lo calificó de "milagro".

La crítica norteamericana se ha rendido a la décima propuesta del director británico de El truco final y Memento. Y comparan su visión descarnada e implacable de la guerra con el arranque brutal del maestro Steven Spielberg en Salvar al soldado Ryan.

Reparto de muchos quilates: Mark Rylance, Kenneth Branagh, Tom Hardy, Cillian Murphy, Fionn Whitehead y Harry Styles, cantante del grupo "One Direction". Música impactante del compositor de cabecera de Nolan, Hans Zimmer. Y fotografía del prestigioso Hoyte Van Hoytema, responsable de trabajos tan exquisitos como Her o El topo. Rodada dando la espalda a los efectos digitales con cámaras IMAX y barcos y aviones reales. Con la guerra no se juega.

A diferencia de otros títulos del cineasta (169 minutos duraba "Interstellar" y a 152 llegaba "El caballero oscuro"), aquí se ha conformado con 107, lo que da una idea de la intensidad y austeridad que pretendía imponer a un proyecto muy personal y que ha tarado muchos años en poner en pie, sin apenas diálogos y una estructura cimentada sobre todo en los personajes del soldado Tommy ( Whitehead), que lucha por sobrevivir, del piloto Farrier ( Hardy) y Dawson, un marinero civil que rescata soldados con su barco (Rylance). Mientras, en un interminable muelle está el comandante Bolton (Kenneth Branagh), que conocía los crueles planes del Gobierno británico para no gastar fuerzas que pudiera necesitar ante una futura invasión nazi.

Matizaba Nolan en una entrevista a la agencia "Efe" que "no se trató de una victoria, ni de una batalla, sino de una evacuación", lo que, aunque puede "resultar bastante simple", acabó siendo algo "muy importante" que forma parte ya de la "historia universal". Eso le permite "hablar del sentido de la comunidad" entre los soldados y los civiles.

Rylance, ganador del "Oscar" al mejor actor de reparto por "El puente de los espías", tenía un trabajo sencillo en teoría pero que en la práctica supuso esperar durante horas el momento para poder rodar. Fionn Whitehead, que interpreta al soldado Tommy, afrontó un duro entrenamiento militar para preparar a fondo su papel.

"No quería que los personajes explicaran lo preocupados que estaban, sino mostrar las situaciones físicas y usarlas para que el público tuviera empatía con ellas", contó el director sobre la escasez de diálogos en una cinta visualmente arrolladora.