Navia, A. M. SERRANO

La ría de Navia está limpia de vertidos industriales. Los residuos procedentes de Industrias Lácteas Asturianas (Ilas), de Anleo (Navia) ya acaban en alta mar. La fábrica empezó a utilizar esta misma semana la infraestructura que permite dirigir estos residuos a través del emisario de la fábrica de la papelera Ence, a un kilómetro y medio de la costa naviega y a 30 metros de profundidad. El nuevo sistema marca un antes y un después para la ría de Navia, ahora libre de residuos industriales tras años de negociaciones entre las empresas y las administraciones públicas y de obras.

El Ayuntamiento de Navia inició hace cinco años las conversaciones con el fin de que las dos fábricas llegaran a un acuerdo que permitiera limpiar la ría de los residuos de las principales plantas industriales de la comarca. La contaminación del estuario siempre pesó en la sociedad naviega. El concejo es el mas pujante de la comarca, precisamente por la instalación de estas compañías, pero también tenía la fama de ser el más contaminado y el punto gris de la franja costera. Finalmente, este sanbenito ha desaparecido.

Las dos plantas vierten ya sus residuos en alta mar y lo hacen tras pasar por un tratamiento específico que verifica el Principado y que tiene que cumplir, por ley, unos niveles máximos de contaminación.

El gobierno naviego del socialista Ignacio García Palacios se felicita por este logro, que supone mantener las aguas sin restos contaminantes y también alejar las polémicas sobre la mortandaz de peces, en tantas ocasiones denunciadas por los colectivos ecologistas y que achacaban a los vertidos industriales.

El sistema fue construido por Industrias Lácteas Asturianas, que a través de un tubo y con un sistema de bombeo, conecta la fábrica con la planta de Ence y, en concreto, con el emisario. Allí se realizan las pruebas pertinentes que miden la contaminación del fluido, con el fin de que cada empresa se haga responsable, en caso de problemas, de sus vertidos. Una vez realizado el tratamiento y el estudio, se deriva a alta mar a través del emisario de Ence, que gestiona esta multinacional y que es propiedad de la Demarcación de Costas.

La contaminación de la ría siempre fue objeto de polémica en Navia. En 2006, las aguas de su playa llegaron a tener más niveles de contaminación de los permitidos, lo que obligó al Principado a alertar de esta situación y advertir de que las aguas no eran aptas para el baño.

Que la ría esté libre de residuos industriales invita a ampliar sus usos y aprovechamientos, según el gobierno naviego. La puesta en marcha de la toda la red de saneamiento, una vez que se construya la depuradora de Foxos, permitirá que la ría quede libre de residuos, en este caso particulares.

El alcalde naviego, Ignacio García Palacios, lamenta que sean las aguas sucias de la villa las que todavía no tengan salida a alta mar. La red de tuberías prevista en el saneamiento integral de Navia ya está construida, pero no ocurre lo mismo con la Estación Depuradora de Aguas Residuales, ubicada en Foxos. Hasta que la red no se conecte con la depuradora, las aguas sucias de Navia siguen desviándose a la ría.

El gobierno de Navia espera solucionar esta situación este mandato. Sin embargo, el vecino concejo de Coaña pelea para que se cambie de ubicación la depuradora, algo que podría retrasar su construcción y, por tanto, su puesta en funcionamiento.

La limpieza de la ría de restos industriales y particulares se asocia con futuros y nuevos aprovechamientos del estuario, como pueden ser el turismo activo. El Ayuntamiento programa, a través del Plan de Fachadas, construir un paseo fluvial y limpiar la zona terrestre de la villa que linda con la ría.