El callejero de San Tirso de Abres se renueva con la incorporación de ocho calles de nuevo nombramiento y con el cambio de nombre del acceso principal a El Llano que, en cumplimiento de la ley de Memoria Histórica, pasará de llamarse General Aranda a ser calle Regada. "Estamos satisfechos con el trabajo porque permite dotar de nombre a muchas calles de El Llano y con ello facilitar la vida de los vecinos y de los servicios que trabajan en la zona", precisa la alcaldesa santirseña Goretti Quintana (PP). Indica, además, que para las ocho calles de nuevo nombramiento se siguieron "criterios geográficos y toponímicos, intentando recuperar la tradición y la denominación histórica". Las calles recogen la doble acepción en castellano y gallego-asturiano.

La modificación se aprobó por unanimidad del gobierno del PP y de la oposición del PSOE, si bien los socialistas solicitaron que la renovación se extienda a otras dos calles con connotaciones franquistas. Es el caso de la Avenida de Galicia, que según el portavoz socialista, Clemente Martínez, se nombró en 1936 tras la entrada de las tropas nacionales, y de la calle Pedro García López, que alude al primer alcalde impuesto por la autoridad militar tras el golpe de estado. La regidora santirseña se mostró dispuesta a analizar ambos casos, examinando la documentación que existe en el archivo municipal.

El pleno también dio cuenta de las alegaciones vecinales presentadas tras la exposición al público de la actualización del inventario de bienes municipales. Quintana explica que "de las más de 600 fichas del inventario solo hubo 17 alegaciones", y no todas fueron aceptadas. Precisa la Alcaldesa que el inventario es algo vivo y que debe ir modificándose poco a poco. El PSOE, que ya criticó el poco tiempo que el gobierno daba para revisar el inventario, se abstuvo. Consideran los socialistas que la actualización es poco completa porque se hizo en base a documentos preexistentes y faltó "más trabajo de campo".

Martínez indica que no tiene herramientas para determinar si el criterio para rechazar algunas alegaciones fue correcto, de ahí que decidieran abstenerse en la votación.