El empresario minero Rodolfo Cachero asegura que la situación de Astur Leonesa, que explota la mina de Cerredo en Degaña, "está en el último minuto, pero que no hay nada perdido". El empresario explica que está trabajando en el cierre de acuerdos con acreedores que permitirían reflotar la empresa y devolverle su administración, que perdió el pasado mes de agosto tras ser condenado a entrar a prisión por ocho delitos fiscales.

Cachero intenta evitar que se lleve a cabo la petición de liquidación que puso encima de la mesa la administración concursal en el mes de febrero y asevera que aún "está a tiempo". La administración había pedido al juez que lleva el proceso que exigiese a la concursada la presentación de un aval solidario que garantizase el pago de los créditos contra la masa, algo con lo que Cachero no se mostró de acuerdo. "Me quitan la administración y le hacen un agujero de 7 millones de euros, cómo voy a poner ahora yo dinero para que otro siga administrando una sociedad que no sabe nada más que llevarla a la quiebra", señala el empresario. Para él la solución está en que le dejen tomar las riendas de nuevo de la empresa.

"Si me hago cargo, me hago de verdad y esos 7 millones se irían reduciendo a partir de los acuerdos que ya tengo establecidos, lo que hay que hacer es empezar a funcionar y a pagar y en unos tres meses los créditos contra la masa se quedaría a cero", asegura.

Para lograr su objetivo de tomar las riendas de la empresa, lo que considera que es la única solución que tendría ahora mismo Astur Leonesa, pide que la plantilla le dé su apoyo.

Ahora mismo en la mina se sigue trabajando con normalidad pero el carbón no está saliendo hacía la central térmica de Compostilla, sino que continúa apilándose en las instalaciones de Cerredo. El motivo está en la falta de cobro de varias nóminas de la plantilla y de los camioneros.