Recuerdo cuando, en el tercer trimestre del año pasado, escribí varios artículos augurando un panorama muy sombrío para los trabajadores y pensionistas españoles con rentas bajas. Evidentemente, era antes de las elecciones, por lo que el Gobierno llamaba antipatriotas a los que teníamos esta opinión. Pero la realidad es tozuda, y la difícil situación económica está poniendo en su sitio al Gobierno de Rodríguez Zapatero.

El aumento del PIB ya no será el primer 3,3 ni el segundo 3,1 de Solbes, ni tan siquiera el 2,7 del FMI, cuando, Zapatero, tratando de desacreditar a Rato, dijo: «El Fondo Monetario Internacional se equivoca un "rato", ja, ja, ja», estamos ya en el 2,4 y bajando a toda prisa.

El problema de la economía española es que creciendo por debajo del 3 por ciento no sólo no crea empleo, sino que lo destruye. Y ahí tenemos las tercas cifras de abril para corroborarlo. El aumento del paro en este mes ha sido de 37.500 personas. Siendo la primera vez desde 1984 que el paro aumenta en abril.

La situación me parece gravísima para las familias más desfavorecidas. El paro aumenta a tasas no vistas desde hace quince años, los precios de los alimentos básicos siguen creciendo de forma incontrolada, los intereses de las hipotecas están en su momento más alto, el barril de petróleo ya ha superado los 120 dólares...

¿Puede alguien dar una noticia positiva? ¿Nos seguirán llamando desestabilizadores a los que lo venimos diciendo desde hace un año? Cerraremos el 2008 con una cifra aproximada de 2.750.000 personas sin empleo. Unos 700.000 hombres y mujeres, españoles y extranjeros, que se quedarán sin trabajo este año. Unas cifras que comienzan a dar miedo, pero también consternación.

Pero también recordarán ustedes que el año pasado algún optimista decía que la actividad industrial sustituiría a la construcción como motor de la economía española. Pues ya tenemos el dato del IPI (índice general de producción industrial) del mes de marzo, y ha caído un 13,3 por ciento respecto a marzo del 2007. ¿Qué significa? Que el deterioro de nuestra economía se está incrementando muy rápidamente. Ya no son sólo la construcción y los servicios, ya tenemos al sector industrial en negativo.

Desgraciadamente, como decíamos antes, el aumento del paro será muy elevado. Se perderán muchos puestos de trabajo, sobre todo los empleos más precarios y en especial dentro del colectivo de inmigrantes.

Y muchas veces me pregunto: ¿somos conscientes de estos dramas? Me estremezco a diario cuando sigo escuchando que no hay que preocuparse, que la economía española está fuerte. Y mientras uno escucha estas estupideces, dos mil personas al día se quedan sin trabajo, sin ánimo, sin esperanza. ¿Por que será que quienes hacen este tipo de declaraciones nunca ven peligrar su puesto de trabajo? ¿Realmente les importarán algo quienes lo pierden?