Colunga, Rebeca Aja
Sin duda ha sido el sustento básico de la alimentación en las zonas rurales de Asturias y Cantabria hasta mediados del siglo pasado. Alimento tradicional por excelencia, el concejo de Colunga le reserva cada mes de abril su propia fiesta y con la del pasado domingo ya son doce. El Festival de la borona preñada de Colunga acaba de alcanzar esa cifra y lo ha hecho con otra tan suculenta como su vianda protagonista. Mil raciones de borona repartieron los jóvenes de la comisión de fiestas de Colunga entre el numeroso público que a lo largo de toda la mañana fue dándose cita en la plaza del Monumento.
Un total de cuarenta boronas hicieron posible este primer festín gastronómico de la jornada, amenizado por la música del grupo folclórico «Xagardúa». El segundo quedaba reservado para quien más pujase por la borona ganadora del concurso, al que concurrieron quince participantes.
La borona ganadora fue vendida en 130 euros, los que pagó Plácido Montero, un vecino de Colunga, por la borona elaborada por Rita Zapico Alonso, cocinera del restaurante La Rula de Lastres. El jurado decidió que el segundo premio recayera en la borona salida del bar La Bodeguina y que alcanzó los 70 euros en la puja. Hasta 55 se pujaron por la preparada en el restaurante Vistalegre.
Una exposición de artesanía y sidra para todos los asistentes completó la oferta lúdica en torno a la borona asturiana, elaborada como antaño, con harina de maíz y buenos embutidos.
