Los alrededor de 140 ganaderos de los concejos de Piloña, Colunga, Parres y Caravia que conforman la Junta Administrativa del Sueve dispondrán este año de 210 hectáreas de superficie para el aprovechamiento colectivo para uso ganadero, a pesar de incrementar ligeramente el número de licencias respecto a la temporada anterior.

En total, este año serán unos 3.650 animales los que podrán pastar por el Sueve durante los próximos meses, de los cuales aproximadamente unos 2.000 son vacas, medio centenar toros y 400 novillos. Completan el total de licencias otorgadas por la junta administrativa 300 ovejas, 350 cabras y más de medio millar de caballos.

Estas cifras son similares al año pasado con sólo un pequeño incremento en cuanto al número de vacas y ovejas. Sin embargo, la pérdida de hectáreas preocupa seriamente a los ganaderos que consideran esta medida un nuevo retroceso para sus intereses. "Cada vez nos limitan más el paso y tememos que pronto no sea suficiente", declara el miembro de la junta Alfonso Artidiello, ganadero en Sardea.

Los productores no comprenden en que se basa la consejería de Agroganadería del Principado de Asturias para limitar cada vez más unos recursos esenciales para la producción ganadera. "No entendemos en que se basan para tomas estas medidas porque ya son varios años perdiendo terreno", indica el propio Artidiello que recuerda que si bien este año se pasó de 2441 hectáreas a 2231, en los años previos ya se habían caído de la barrera de las 2.500 que como mínimo solían ser pastadas.

De todas formas, no se trata de la única queja proveniente de la junta administrativa. A este problema de superficie, los ganaderos de la zona añaden las dificultades para obtener permisos para limpiezas y quemas controladas, así como la falta de control del gamo y el jabalí. "No es cuestión de recursos, sino de voluntad política", recuerdan.