El nuevo consultorio médico de Lastres quedará instalado en la residencia de mayores que el Principado ha construido, pero aún no ha abierto, en el barrio de El Manso. Las autoridades regionales y municipales trasladaron esta propuesta a los vecinos de la villa marinera para que la votasen en asamblea y la mayoría dijo "sí" en una reunión convocada a última hora del lunes.

Asistieron cuarenta personas, de las que treinta dieron su apoyo a una propuesta que llega después de conocerse que la inicial, ubicar el centro de salud en la Oficina de Turismo, podría demorarse años. Este inmueble pertenece en la actualidad al Ministerio de Empleo, que tendría que cederlo para que el Principado pudiera acometer las obras de adaptación necesarias para prestar allí la atención médica primaria.

Por este motivo la disyuntiva que se les planteó a los llastrinos fue: o esperar el tiempo que sea necesario -los diputados del PP que se reunieron con los vecinos hablaron de dos o tres años- a que los trámites necesarios para la cesión se completen o aceptar esta nueva ubicación. José Ángel Moro, portavoz de los vecinos en este asunto, explicó que el visto bueno de la población ha sido condicionado a que la residencia de mayores no pierda capacidad ni en su condición de centro de día ni como alojamiento.

El Principado se ha comprometido a que así sea y pretende abordar en la reunión del Consejo de Gobierno de esta semana el traslado del centro sanitario. Fue la voluntad de llevar este asunto al próximo consejo lo que llevó a las autoridades regionales y locales a urgir el veredicto de los vecinos y por eso la asamblea se convocó con una cierta premura.

Sus organizadores colocaron carteles anunciadores y lamentan no haber tenido más tiempo, pero también consideran que había poco margen para la elección. De un lado una espera sin fecha y del otro un nuevo centro de salud que contará con tres salas y un acceso para personas con movilidad reducida en el edificio de la residencia de mayores, en la parte alta de la villa marinera.

Pese a que desde el Principado no se ha dado ninguna fecha concreta de apertura, los vecinos confían en que sea inmediata. Tras pasar más de un mes con el consultorio de la calle San Antonio cerrado por una plaga de pulgas, las protestas a pie de calle lograron que este local se volviera a abrir, esta vez con la condición de provisional y hasta que se encontraba una solución definitiva para ubicar este servicio.

La obra de la residencia se inauguró la semana antes de las elecciones municipales y autonómicas de mayo, pero todavía no ha entrado en funcionamiento. La residencia tendrá una capacidad de 56 plazas, cuatro menos de las previstas por la necesitad de redistribuir el espacio para poder habilitar salas para enfermeros y auxiliares de enfermería.

El centro de día tendrá una capacidad para quince personas. En cuanto al personal que trabajará en el equipamiento, las entre quince y diecisiete plazas de auxiliares de enfermería, director y técnico de intervención serán públicas, mientras que el personal de servicios hoteleros, cocina y conserjería será subcontratado.