Las obras para adaptar uno de los bajos de la residencia de mayores de Lastres y convertirlo en el nuevo centro de salud comenzaron ayer y estarán concluidas en la primera quincena del mes de enero. Así lo avanzaron fuentes de la empresa que realiza los trabajos, Asocon Grupo SL, que ya han comenzado a tirar tabiques y reorganizar los espacios.
La residencia está acabada pero todavía no ha entrado en funcionamiento y el consultorio periférico ha tenido en sus instalaciones el destino final después de que una plaga de pulgas evidenciara en junio la necesidad que había de una nueva ubicación.
En primer lugar se barajó la Oficina de Turismo, pero los trámites burocráticos necesarios para que el Estado cediera el local hicieron que tanto el Gobierno regional como el Ayuntamiento desistieran.
Los trabajos que comenzaron ayer consisten en la adecuación del espacio para el consultorio periférico, un fin para el que no estaba inicialmente proyectado. De esta forma, es necesario tirar tabiques y realizar una nueva distribución para adaptar las instalaciones al nuevo uso que tendrán. Se habilitará una consulta de enfermería y otra para el médico, un baño convencional, otro adaptado para personas con movilidad reducida y un tercero para el personal del centro médico.
Acceso rodado
En Lastres preocupa cómo se organizará el tráfico rodado una vez que tanto la residencia de mayores como el consultorio médico estén en pleno funcionamiento. La calle que da acceso a ambos equipamientos por el barrio de El Manso es muy estrecha y el problema puede surgir si se cruzan varios vehículos, e incluso una ambulancia, para salir y entrar a las instalaciones.
El PP recogió esta inquietud y la trasladó en el último pleno. Su portavoz, Cristina Alonso, preguntó si el equipo de gobierno tiene un "plan b" para ese momento, "si ensancharán esa calle para que puedan pasar bien dos vehículos, habilitarán un acceso por arriba o qué se piensa hacer". El alcalde, el socialista Rogelio Pando, explicó que la Policía Local "está haciendo un estudio pero no lo culminarán hasta que entre en funcionamiento". De este informe se espera salga la solución para ordenar el tráfico en la zona de forma que sea fluido para los usuarios de ambos servicios públicos.
Cuando se solucione este aspecto se cerrará un largo capítulo de la historia reciente de Lastres, el que gira en torno a la atención médica que los vecinos han visto peligrar. El consultorio local ha pasado por la Oficina de Turismo y por la Casa del Mar, de donde se sacó ante la supuesta amenaza de ruina del edificio. Este inmueble continúa en pie y el Estado quiso subastarlo en 800.000 euros, aunque la puja quedó desierta. El consultorio médico se llevó entonces al local de la calle San Antonio en el que ha permanecido durante los últimos años y en el que en 2012 ya se registró una plaga de pulgas que lo mantuvo cerrado un tiempo.
El pasado mes de junio, los insectos volvieron a aparecer en el consultorio y los vecinos estuvieron desplazándose a Colunga para recibir atención médica hasta finales de junio, cuando se reabrió el local de la calle San Antonio de forma provisional y bajo la promesa de que se buscaría un nuevo emplazamiento.
