La redistribución de competencias en el gobierno local riosellano provocó uno de los debates más intensos de la sesión plenaria. La alcaldesa, Charo Fernández Román, explicó que Empleo se distribuye en tres partes: promoción empresarial lo llevará ella, promoción del empleo, Pablo García (que llevaba la competencia completa hasta ahora), y formación para el empleo, Jorge Núñez. El otro cambio afecta a la concejalía de Participación Ciudadana, que pasa de Enrique Gancedo (Obras y Servicios) a María José Bode (Bienestar Social y Cultura). La regidora explicó que la redistribución se hace para "equilibrar concejalías", pero defendió el "trabajo en equipo. Todos hacemos de todo", concluyó.

En el mismo pleno, Pueblu presentó la moción en la que instó al equipo de gobierno a "realizar los cambios necesarios para subsanar las deficiencias observadas", en referencia a la pérdida de la subvención regional para un plan de empleo, achacada a García. La moción recibió duras críticas por parte de PP y PSOE, que votaron en contra. Los primeros criticaron que los sueldos de las liberaciones y los sueldos de los concejales vaya a seguir igual con diferente reparto de tareas, una interpretación en la que coincidieron los socialistas. Ambas formaciones pidieron en el pleno anterior la dimisión de Pablo García, pero lo consideraron una "decisión personal" y rechazaron una reivindicación que el PP consideró "pactada".

La Alcaldesa, por su parte, agradeció el trabajo del edil y descartó que la reorganización de competencias se deba "a una reprimenda o una pérdida de confianza", sino a algo que "puede beneficiar a Ribadesella porque se reparte mejor el trabajo".