El Gobierno del Principado ha dado el visto bueno a las reivindicaciones que, desde hace tiempo, vienen realizando tanto los vecinos de Bricia como el Ayuntamiento de Llanes para la adopción de medidas de seguridad en la carretera LLN-11 a su paso por la localidad de Bricia. Se trata de un tramo peligroso, que en los últimos años ha registrado numerosos atropellos de peatones y otros accidentes. El paquete de medidas que se ejecutará pasa por la creación de un paso sobreelevado o la colocación de señales luminosas. Se estudiará también la posibilidad de crear un reductor de velocidad tipo lomo de burro y la limitación de la velocidad a 30 kilómetros por hora. Las obras comenzarán a ejecutarse en el mes de noviembre, informa E G. C.