El inspector jefe de la Policía Local de Llanes, Miguel Gómez López, y el agente Miguel Ángel Díaz Pacheco no han cometido infracción alguna que merezca sanción, ni económica ni laboral. Es la conclusión a la que ha llegado el instructor de los expedientes abiertos contra los dos policías llaniscos. Ayer mismo se reincorporaba al trabajo el agente, mientras que el inspector jefe lo hará en los próximos días, ya que disfruta de unos días de descanso.
Gómez López había sido suspendido de empleo y sueldo por el equipo de gobierno de Llanes de manera cautelar "por un mal funcionamiento del servicio". Fue, el 10 de octubre, la primera medida tomada para apaciguar los ánimos en el seno de la Policía Local, colectivo que vive una guerra abierta desde hace años que se recrudeció entonces, tras un altercado entre los dos agentes, que terminó con una denuncia de Gómez López contra Díaz Pacheco por presuntas amenazas de muerte y desobediencia. El equipo de gobierno abrió una investigación para aclarar los ocurrido, a raíz de los hechos denunciados por los sindicatos SIPLA y USIPA, colectivos que solicitaron que se tomasen medidas contra el inspector jefe. El cuatripartito abrió expediente a los dos policías.
