Una noche entera con el brazo roto por varios sitios se pasó una vecina de Peñamellera Baja, octogenaria, que acudió hace unos días al hospital de Sierrallana, en Torrelavega (Cantabria), convencida de que el convenio firmado hace unas semanas entre los gobiernos cántabro y asturiano le permitiría ser curada, hasta recibir el alta, en la comunidad vecina. No fue así, en Torrelavega, a donde le llevó un hijo, tras una primera cura y diagnosticarle la rotura del brazo y la necesidad de cirugía, la informaron de que al no ser vecina de Cantabria no podía recibir tratamiento quirúrgico y debía acercarse al hospital de Arriondas. Además, por desconocimiento, le dijeron que quizá no hubiera en el Grande Covián cirujano de guardia por las noches (lo hay las 24 horas), por lo que la mujer se fue a su casa y, tras pasar una noche "de perros", acudió a la mañana siguiente al hospital de Arriondas, donde al fin recibió la atención que necesitaba.

Así relató ayer "un caso real" la pediatra del hospital de Arriondas Covadonga Tomé, quien denunció las lagunas del reciente acuerdo suscrito con Cantabria para que los vecinos de Ribadedeva y las dos Peñamelleras puedan acudir al hospital de Torrelavega. Tomé culpó a los dirigentes políticos de trasladar a la ciudadanía "mentiras" o "verdades a medias". Según Tomé, en Sierrallana, "hoy por hoy", solo se presta a los asturianos atención de urgencia, pero no toda la atención asistencial hasta recibir el alta, como prometió el Principado.

Covadonga Tomé relató otro caso más, el de una embarazada de Lastres que acudió a Atención Primaria tras leer que por fin había matronas en el área sanitaria del Oriente. En su primera cita, ya con 20 semanas de embarazo, comprobó que efectivamente hay por fin matronas (el área estuvo varios años sin ellas, pese a que las plazas estaban presupuestadas), pero que no tienen "sitio donde pasar la consulta, ni báscula, ni impresora, ni un plan de acción", desveló Tomé.

La pediatra mostró su indignación por las carencias del área VI. Denunció que las matronas llevan más de un mes "como almas en pena" porque no tienen las mínimas condiciones para realizar su trabajo y carecen de "apoyo logístico". Servicios como Pediatría o Radiología tienen carencias de personal. Denunció asimismo la derivación de "muchas más gestantes que antes" a oros hospitales.