El sonido del saxofón inundó durante toda la semana el emblemático edificio modernista del Casino de Llanes. En su interior, el saxofonista de San Martín de Rey Aurelio José Suárez-Suárez, durante años catedrático del Conservatorio Real de Bruselas, ofreció un curso magistral con este instrumento de viento como protagonista. Su manera de tocar y la sensibilidad que demuestra a la hora de interpretar diferentes obras con el saxofón, han cautivado a los alumnos que han acudido al curso con el objetivo de lograr un perfeccionamiento en el estudio e interpretación de un instrumento musical que no ha dejado de evolucionar desde que fuera creado, a mitad del siglo XIX.

José Suárez-Suárez mostró desde muy joven una marcada afición por el saxofón, lo que le llevó a Bélgica. Allí pasó a formar parte de la academia de música del prestigioso maestro Jean Absil, con el que estudió solfeo, armonía, contrapunto e historia de la música. En el Conservatorio Real de Bruselas fue alumno de con François Dannels. A lo largo de su exitosa carrera ha dado conciertos como solista y acompañando a numerosas orquestas por toda Europa.

Montse Llano Covián y Amado del Moral son dos de los alumnos del curso. Éste último llegó a Llanes desde su Palencia natal para tomar parte en la master class tras conocer la existencia de la misma a través de un cartel que vio en el Conservatorio de Valladolid. Llegó con la idea de perfeccionar la técnica con un instrumento con el que recientemente ha logrado el grado de saxofonista profesional.

"Toco desde hace veinte años. Antes tocaba la guitarra eléctrica en orquestas", aseguró. En la villa de Posada Herrera combina el curso con unos días de asueto estival. Del Moral se deshace en elogios hacia el estilo del músico asturiano que sentó cátedra en Bélgica. "Posee en estilo suavecito y enamoradizo. Tiene algo más que técnica y sabe dar a las obras que interpreta dulzura y unos matices muy interesantes. Es un profesor muy conservador pero muy estilista. Me ha sorprendido positivamente. Es pura cátedra y un fenómeno. Me hablaron muy bien de él y aquí estoy", señaló. Pretendía perfeccionar, entre otras obras, el concierto de Glazunov para saxofón, pues deberá presentarlo en concierto para corroborar el título de saxofonista profesional. "Toco cuatro o cinco horas al día. Con el saxofón dejo de lado el estrés y me relajo. Es una pena que este curso dure tan solo una semana. Se me hace poco", señaló.

Montse Llano, de la localidad piloñesa de Villamayor, repite en el curso con Suárez-Suárez. Tras tocar en la Banda de la Escuela de Música de Llanes ahora lo hace en la de Infiesto. Su objetivo, al matricularse en este curso, pasaba por mejorar la interpretación. "Tener a tu disposición a un profesor así es un lujo", dijo durante un descanso de una las clases.

"La constancia, el rigor y que te guste mucho este instrumento es lo más importante. No hay que dispersarse de los objetivos que te marques. Se debe simplificar uno, lograrlo e inmediatamente ir a por otro", señaló el prestigioso músico de San Martín del Rey Aurelio que gracias a su talento ha sentado cátedra con el saxofón, un verano más, en el Casino de Llanes.