Casi un año después de que se ejecutara la sentencia judicial que ordenaba el derribo de la nave que tenía en el barrio de El Barrigón, la empresa Muebles Pacoli inauguró ayer su nueva tienda, en la avenida de la Playa de Colunga. La demolición se realizó el 1 de septiembre del año pasado y los hermanos Omar y Borja Álvarez Freile se sienten cada vez más cerca de respirar tranquilos.

"Teníamos ganas de estar instalados y no pendientes de una llamada del abogado o una carta certificada", explicó ayer el primero. Los empresarios presentaron una reclamación patrimonial al Ayuntamiento de Colunga de 381.000 euros, pues la nave que los tribunales declararon ilegal por estar construida sobre un terreno de interés agrícola contaba con licencia municipal. "Todavía estamos negociando", apuntó Álvarez Freile, cuya propuesta están estudiando en el Ayuntamiento, comparándola con una valoración alternativa de la nave.

La nueva tienda es algo más pequeña que la anterior (casi 600 metros cuadrados frente a los 800 de la otra) y fue construida en el año 2004. Se ofreció en alquiler pero nunca se ocupó y los empresarios colungueses la han comprado. Desde la fecha del derribo hasta esta inauguración, que llega tras casi tres meses de obras para acondicionarla, Muebles Pacoli ha estado en el almacén de El Carril en el que empezó el padre de los actuales propietarios en 1970.

Los dos hermanos agradecieron ayer a cuantos les han apoyado, tanto "de palabra" como en "ventas, que sin ver nada es difícil en el mundo de los muebles". Ayer comenzaron una nueva etapa de su vida profesional "con la misma ilusión del primer día".