La cineasta asturiana Eliana Álvarez está a apenas quince días de concluir un largo trabajo de tres años: ya solo falta ponerle música a su película "Spirit of Discovery", un documental de una hora de duración en el que cuenta dos historias, la del eminente físico oceanógrafo Walter Munk y la de una expedición de unos biólogos marinos para encontrar a un animal de la familia de las rayas, la que en su honor llaman mobula munkiana. La película se estrenará el 7 de octubre en San Diego (Estados Unidos). Tanto la fecha como el lugar tienen su significado: el 19 de ese mes Munk cumplirá 100 años y en San Diego vive e inició su trabajo. A Eliana Álvarez, celoriana y gijonesa que reside en Nueva York desde hace años, le encantaría que "Spirit of Discovery" pudiera ser visto también en el Festival de Cine de Gijón, que se celebrará en noviembre.

Munk es responsable del éxito del desembarco de Normandía en la II Guerra Mundial, pues sus cálculos determinaron la fecha y la hora. Y Eliana Álvarez ha logrado dos cosas que nadie de cuantos le conocen hubiera creído: ponerle delante de una cámara para convertirlo en protagonista de un documental y conseguir que se enamorara de la tortilla española (no le gustan nada las patatas). El caso es que lo que en un primer momento iba a ser un corto acabó convirtiéndose en un documental de 60 minutos de duración que habla sobre los fracasos: los de un genio y los de la expedición de los biólogos.

La película ha costado 35.000 dólares, pero "si se hubiera pagado a todo el mundo" habría costado unos 250.000. Y es que Eliana Álvarez ha encontrado mucha ayuda. La última, la de un matrimonio de inversores que aportó una buena suma de dinero, aunque "no toda la que hacía falta", aclara la cineasta llanisca.

La directora y guionista, hija de celorianos criada en Gijón, se ganó a Munk desde que le propuso participar en "Spirit of Discovery". A Eliana le habían asegurado que Munk le daría calabazas, pues nunca se ponía delante de una cámara y sólo aceptaba, muy de tarde en tarde, entrevistas para medios escritos. Pero ella, llevada por su "vena asturiana", le plantó un par de besos en su primer encuentro y a partir de ahí todo fue rodado. Hubo química.

Munk aceptó viajar a Cabo Pulmo, en México, en busca de la mobula munkiana. El equipo no encontró los miles de ejemplares que suelen nadar juntos en esa zona del mar de Cortés, dando saltos de hasta tres metros de altura fuera del agua, pero, a cambio, hallaron algo que nadie antes había visto y de lo que no se tenían noticias: los "nidos" de los bebés de esa singular especie.

"Spirit of Discovery" relata la apasionante vida del científico, sus descubrimientos y analiza si puede calificarse de fracaso no lograr el objetivo perseguido, pero sí otros inesperados. Munk considera que ha fracasado en buena parte de sus investigaciones. Y, sin embargo, ha alcanzado hitos históricos. Entre otros muchos, sus estudios sobre la longitud de las olas cuando trabajaba para el Ejército de los Estados Unidos, que fueron los que llevaron al entonces presidente Dwight Eisenhower a retrasar 24 horas el "día D", cuyo éxito fue determinante para el resultado final de la Segunda Guerra Mundial. Sin los hallazgos de Munk, los aliados se hubieran topado en Normandía con olas de hasta diez metros de altura en la jornada que habían previsto inicialmente.

Walter Munk, a punto de ser centenario, sigue trabajando, y "se queja de que no le dejamos trabajar lo suficiente", resalta Eliana Álvarez, que descansa durante estos días en Asturias. Munk trabaja en la actualidad en asuntos relacionados con los trabajos de William Thomson Kelvin, creador de la escala de temperatura que lleva su nombre.

Lejos queda ya en la memoria el día en que el productor de su anterior trabajo le propuso a Eliana Álvarez hacer una película sobre Munk. "Yo no tenía ni idea de quién era", señala la cineasta. Pero "la historia sonaba genial y decían que había dinero", añade. Pero los dólares nunca llegaron y la asturiana tuvo que arreglarse como pudo.

La celoriana regresará en unas semanas a los Estados Unidos, para afrontar una nueva fase de "Spirit of Discovery", la de su presencia en festivales y su distribución, "también muy dura", señala. De momento, la película ya le ha gustado a su protagonista. Walter Munk, quien tras visionarla hace unas semanas le dijo a Eliana Álvarez: "por fin tienes un tema". Y es que, en un primer momento, el físico no acababa de ver la relación entre su biografía y la expedición de los biólogos marinos. Ahora sabe que Eliana Álvarez, a la que pide que prepare tortilla de patatas cada vez que lo visita, sí ha encontrado la relación. El devenir del documental puede seguirse en la dirección: https://www.facebook.com/moviespiritofdiscovery.