Las obras de construcción del nuevo depósito de agua del Colláu lAndrín, en Parres, llegan a su fin.

Las instalaciones, con capacidad para 15.000 litros, sustituyen a unas antiguas y permitirá garantizar el suministro de agua a la localidad parraguesa, según explicó el alcalde, el socialista Emilio Manuel García Longo.

El regidor supervisó los trabajos el pasado lunes y mostró entonces su satisfacción por la ejecución de los mismos. La sustitución del antiguo depósito de agua de Colláu l'Andrín era una petición que los vecinos, con su alcalde de barrio Manuel Calzón a la cabeza, llevaban años reclamando.

Las obras que ahora concluyen tuvieron un coste total de ejecución de 38.000 euros, que fueron sufragados por la Consejería de Infraestructuras, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente. El proyecto del Principado en Parres incluye además reformas en el sistema de Les Dueñes, al que se dota con un equipo de cloración para incorporar hipoclorito sódico al suministro de agua potable.

El gobierno regional ejecutó además obras para mejorar el suministro de agua en el vecino concejo de Piloña. Allí los vecinos de Coya sufren desde hace años un problema de turbidez cada vez que se registran fuertes precipitaciones. Los trabajos, valorados en 55.642 euros, incluyen la instalación de un sistema de filtrado junto al depósito antiguo. Dicho sistema incluye un depósito vertical adicional con capacidad para 5.000 litros, que recoge el agua bruta de las captaciones. Desde ese depósito y mediante dos bombas se trasega agua a la entrada del filtro. El agua, una vez filtrada, se incorporará al viejo depósito, que actúa como recipiente para el agua tratada. La limpieza se efectúa con una electro-válvula y todo el sistema está controlado por un cuadro de control.