"Contentos" y "aliviados". Así dicen sentirse los representantes de la Asociación de Madres y Padres (AMPA) del Instituto Rey Pelayo de Cangas de Onís tras conocer que el Principado proyectará un nuevo edificio en la parte trasera del patio del centro educativo, tal como venían reclamando desde hace meses. "Lo hemos logrado gracias al esfuerzo de todos, empezando por el alcalde de Cangas que desde el primer momento nos brindó su apoyo", señaló el presidente de la AMPA, Antonio González.
La Consejería de Educación defendió inicialmente que la ubicación más adecuada para el inmueble estaba en el patio delantero, ya que el trasero corría riesgo de inundaciones. El consistorio consiguió el visto bueno de Confederación Hidrográfica del Cantábrico (CHC) para construir cerca del río, justo donde se levanta un edificio educativo pendiente de demolición por fallos estructurales. Tras intensos días de negociaciones por parte de la AMPA con los distintos grupos con representación parlamentaria, Educación rectificó y anunció un nuevo proyecto donde pedían los padres. "Estaremos vigilantes", apuntan los progenitores, que urgen el arreglo de los barracones donde desde enero de 2015 reciben clase cerca de doscientos alumnos del instituto cangués.
