D. O.

Es un chico con formación de música clásica, piano, solfeo y esas cosas que un día empezó a componer música para teatro y que de repente descubrió que la música podía salirse de las partituras y meterse en una mesa de mezclas.

El veterano disjokey lleva muchos años en esto y anda de gira por medio mundo. Llega de Madrid y en unos días estará en Italia con una de sus conocidas sesiones de techno.

A falta de una noche específica para este tipo de música, como había otros años en San Mateo, Varela fue el refugio de los fans de las mezclas.

Estaba previsto que subiera al escenario de la plaza de la Catedral al filo de la una de la madrugada, media hora después de que acabasen los fuegos artificiales. Así que con sus sonidos Varela fue el encargado de poner el restallón final, los últimos sonidos que retumbaron en Oviedo. Muchos de sus jóvenes seguidores pudieron bajar del Parque de Invierno y llegar a tiempo al concierto.