El estomatólogo Emilio Macías es consultor de la Unidad de Trastornos del Hospital Marqués de Valdecilla de Santander. Ha impartido recientemente un curso en Oviedo, en el Colegio de Estomatólogos, sobre la apnea obstructiva del sueño.

-¿Qué es la apnea?

-Se produce en la vía aérea superior, afecta el paso de aire y disminuye la cantidad de oxígeno en sangre.

-¿Es muy común?

-Presenta una prevalencia entre adultos de entre el cuatro y el seis por ciento y en mujeres de entre el dos y el cuatro por ciento. Se diagnostica más en los varones pero muchas mujeres la padecen y no lo saben.

-¿Cuáles son los síntomas?

-El primero que hace sospechar es el ronquido. La excesiva somnolencia de día también es un indicio. La apnea es peligrosa, sobre todo cuando se trabaja en profesiones de riesgo, como los conductores o quienes lo hacen en alturas. La apnea dificulta la concentración y afecta a la calidad de vida.

-¿Ronquidos y apnea están unidos?

-Todos los pacientes que padecen apnea del sueño son grandes roncadores, pero no todos los roncadores tienen apnea. También hay grados de severidad, hay apneas leves y síndromes severos. Es una enfermedad que afecta a la presión arterial.

-¿Puede derivar en problemas de salud más graves?

-Puede causar un infarto, un accidente cardiovascular o cerebro vascular y está detrás de ciertos accidentes de tráfico inexplicables.

-¿Qué tratamiento aconseja?

-En el caso de los pacientes adultos, suele ser el médico de Primaria es el que se hace cargo. Habitualmente es la pareja la que advierte que el enfermo hace una inspiración fuerte y luego empieza a roncar, eso sucede entre 300 y 600 veces en una sola noche. Se les suele remitir a una unidad del sueño, donde los neurólogos hacen un diagnóstico. Hay una prueba, la polisomnografía, en la que se registran variables neurofisiológicas, cardiacas, respiratorias, el oxígeno en sangre, el ronquido y con todo ello se hace un diagnóstico. El plan de tratamiento suele ser pluridisciplinar. Hay un aparato de presión compresiva que produce una columna de aire e impide que se cierre la vía respiratoria, unos dispositivos de avance mandibular, que mantienen la mandíbula más adelantada, de modo que la lengua avanza y la vía aérea se abre. Y tratamientos que caen en la esfera quirúrgica.

-¿Y el papel del dentista?

-El dentista juega un papel clave en el equipo multidisciplinar formado por el neumólogo, que es el director de orquesta, y los neurofisiólogos, otorrinos, y los cirujanos maxilofaciales.