Las medidas policiales contra el "botellón" que ayer puso en marcha el Ayuntamiento en el Antiguo de cara al fin de semana ante el final de los exámenes ha encendido los ánimos en el seno del tripartito local (Somos, PSOE e IU). El fuego cruzado lo inició IU. Desde la coalición acusaron al concejal socialista Ricardo Fernández, responsable del área de Seguridad Ciudadana, de actuar como "el Llanero Solitario para tratar de reprimir" el "botellón".

Cristina Pontón, portavoz de IU en el Consistorio, solicitó a los socialistas "escuchar lo mucho" que diversas entidades de la región tienen que decir sobre medidas educativas para luchar contra el consumo del alcohol entre los jóvenes. Al tiempo, animó al PSOE a "dejar la estrella de sheriff de cinco puntas para el próximo Carnaval". Pontón aseguró que el despliegue policial previsto en el casco antiguo contra el consumo de alcohol en la calle se trata de "una medida del PSOE de Corcuera", en referencia a la ley de "la patada en la puerta" (de Seguridad Ciudadana) que tanta polémica generó a comienzos de los años 90 del siglo pasado en tiempos de Felipe González y que se impulsó en la etapa de José Luis Corcuera al frente del Ministerio del Interior.

La portavoz de IU añadió que resulta "sorprendente" que sea el PSOE quien "aplique una ordenanza que no es de este gobierno y que ni si quiera su impulsor (el PP) se atrevió a ejecutar". "En estas políticas represivas y sancionadoras, IU ni está ni se le espera", advirtió Pontón. "Lo que tenemos que hacer es ofrecer alternativas y no utilizar la represión para hacer política", añadió, y abundó sobre la necesidad de poner en marcha una comisión monográfica para analizar la actual ordenanza de Convivencia Ciudadana.

La respuesta desde las filas del PSOE no tardó en llegar. El grupo municipal socialista lo hizo a través de su edil Diego Valiño, que tachó de "incomprensible" e "inaceptable" la postura de IU al acusar a los socialistas de apostar por políticas represivas y sancionadoras "en asuntos tan serios y tan poco proclives a la demagogia" con el "botellón". Valiño aseguró que "a poco que se eleve la mirada" la lucha del Ayuntamiento contra el "botellón" se centra en medidas "basadas en la prevención, el análisis de los comportamientos de los jóvenes y en la oferta de alternativas de ocio". Valiño reconoció que estas políticas "pueden mejorarse, y en eso estamos", pero replicó a IU que "es rigurosamente falso que no existan y que no sean prioritarias para nosotros". Valiño tachó las declaraciones de la edil de IU de "menosprecio" al trabajo que desarrollan "una gran cantidad de organizaciones, entidades y administraciones públicas en el seno de la comisión de seguimiento del Plan de Drogas".

Revisión de la ordenanza

Por su parte, desde Somos se fue menos contundente. El edil podemista Rubén Rosón dio una de cal y otra de arena. Por un lado, abogó por abordar "la realidad del 'botellón' desde el plano educativo". Pero por otro, añadió que "con respeto absoluto a la división de áreas de nuestro gobierno, estaríamos de acuerdo en cambiar la actual ordenanza de Convivencia Ciudadana", tal y como quiere hacer IU.