La perra "Tequi", una mestiza de bodeguero de nueve años, murió desgarrada por un perro pit bull de unos cuarenta kilos el pasado viernes por la noche en el parque de Villa Magdalena. El animal, de una raza considerada potencialmente peligrosa, no tenía seguro y estaba al cuidado de un sobrino de su propietaria, que lo llevaba con un bozal de tela. El dueño de la perrita fallecida, muy afectado, al igual que su familia, ha presentado denuncia.
Luis Bastida sacó al parque a "Tequi" y a su otro perro, "Milton", el viernes a las 23.30 horas. Tras dar un paseo, los soltó en una esquina del parque para que hicieran sus necesidades. "En ese momento el pit bull vino como una flecha a por mi perra. Llevaba un bozal de tela, pero no estaba apretado. La cogió por una pata y ya no la soltó", explica Bastida. "Empecé a darle patadas para que la soltase, pero no había manera. Mi perra estaba desquiciada y me mordió. En ese momento vino un chico con mucha sangre fría, le estoy muy agradecido. Puso una mochila al lado del pit bull para llamar su atención; funcionó y por fin la soltó", cuenta. El propietario cogió a "Tequi" en brazos y la llevó a la clínica veterinaria. La operaron de urgencia y el animal aguantó la noche, pero al día siguiente murió. "Era como si hubiese metido la pata en una trituradora", explica. Luis Bastida se consuela con que, por lo menos, su hijo de seis años, pudo despedirse de su querida "Tequi". "Nos pidió ir a verla porque la quería muchísimo y a veces dormía con ella, está muy triste", relata el padre.
"Tequi" era una de esas perras abandonadas que encuentran el calor de una familia. La dejaron en una playa de Cádiz cuando era una cachorra. Estaba coja de una pata cuando la trajeron a Oviedo, con un año. "Era muy buena perra, tenía un carácter muy noble y alegre y jamás se mostró agresiva con nadie o con otros perros", cuenta. Luis Bastida explica que se decidió a presentar una denuncia para que ninguna familia tenga que pasar por lo que la suya está pasando estos días. "Los propietarios del perro que la atacó querían pagar de la factura veterinaria y su abogada dice que eso demuestra buena voluntad. Ya hice constar en la denuncia, que vinieron a la clínica y se interesaron por mi perra. Pero no se trata de eso, no basta con pedir perdón. Las leyes están para cumplirlas", reflexiona. Luis Bastida asegura que si gana el pleito interpuesto por la muerte de su perra donará el dinero a una protectora de animales.
Susto en Ventanielles
Dos perros considerados "potencialmente peligrosos" se colaron a las diez de la noche del pasado martes en un patio de vecinos de la calle Río Nonaya, en Ventanielles, y mataron un gato. Los vecinos alertaron del incidente a la Policía Local, que se personó en el lugar para entrevistarse con el responsable de los animales. Según ha trascendido, la persona que estaba paseando a los perros era un familiar de la propietaria, quien aseguró que se le habían escapado cuando vieron al gato, que se refugió en el patio de vecinos.
