Uno de los grandes proyectos urbanísticos del tripartito, la ordenación de una gran superficie verde de 310.000 metros cuadrados en la parte baja del Naranco, se tambalea. Concluido el plazo de presentación de ofertas iniciado en enero, ninguna empresa ha mostrado interés en el contrato para redactar el proyecto para este parque forestal, dotado con 60.000 euros. Pese al inesperado revés, la Concejalía de Urbanismo, a cuyo frente está Ignacio Fernández del Páramo (Somos), no tira la toalla. "Vamos a analizar lo que ha pasado, mejorar el pliego para hacerlo más atractivo y volver a sacarlo a licitación", apuntan los portavoces del área.
Según fuentes municipales, en el fracaso de esta licitación no habría tenido nada que ver el aspecto económico, ya que se consideran "suficientes" los 60.000 euros de presupuesto para la redacción del proyecto. La falta de ofertas, según esas mismas fuentes, guardaría relación con el hecho de que se incluya la obligación de llevar a cabo un proceso de participación pública para incorporar las opiniones de los vecinos y colectivos ciudadanos.
El Ayuntamiento ya dio luz verde en septiembre a los planes especiales de urbanismo que deberían servir de base para la intervención en el Naranco, uno de cuyos objetivos principales es la protección de las "joyas" prerrománicas de San Miguel de Lillo y Santa María del Naranco. Las fichas que han sido incorporadas al Plan General de Ordenación recogen la configuración progresiva de un sistema general de zonas verdes en la falda del monte, que sirva de transición con la zona urbana, además de mejorar la accesibilidad de la ladera meridional y el entorno de los monumentos. La actuación prevista se divide en dos ámbitos y afecta a una superficie total de 310.000 metros cuadrados.
La idea es crear un parque forestal en el que se permita una mínima urbanización. Así, se prevén itinerarios peatonales y para bicicletas, además de diversas áreas recreativas. El plan no recoge el derribo de las construcciones que hay en el ámbito de actuación, excepción hecha de la antigua rectoral de Santa María.
En esta iniciativa no se incluye la carretera de circunvalación conocida como variante del Prerrománico, concebida para alejar el tráfico de los monumentos y que sigue su propia tramitación. Esta vía de circunvalación tendrá una longitud de 1,4 kilómetros para alejar el tráfico del conjunto monumental declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. La previsión es que tenga seis metros de ancho y que incorpore un carril bici en el sentido de subida. Partirá de la avenida de los Monumentos, donde está la parada de autobús de Las Delicias, poco antes del desvío hacia Ules. Luego, discurrirá por un pequeño túnel en las inmediaciones de Constante, para enlazar con la calzada actual un poco más arriba de la parrilla Buenos Aires. También se proponen variantes en las curvas para endurecer la subida ciclista.
