El Oviedo fue de menos a más para lograr su primera victoria en la Liga. Los azules, tras un primer tiempo en el que fueron superados por el Almería, resolvieron con solvencia en la segunda mitad, en la que no dieron opciones a un rival que se vio lastrado por la expulsión de Diamanka en el minuto 59.

Hierro optó por dar continuidad al equipo que perdió en Valladolid, con las únicas novedades de Varela por Peña y Jonathan Pereira por Linares.

El Almería entró mejor en el partido que los azules. Los andaluces presionaron bien la salida del Oviedo, se hicieron con el balón y además fueron los que generaron las primeras situaciones de peligro. Lo hizo Azzed con un disparo flojo a las manos de Juan Carlos, en el minuto 5, y poco después el lanzamiento de Jonathan Zongo se marchó alto.

Los azules tenían muchos problemas en la elaboración. Los dos pivotes apenas entraban en juego, ya que Diamanka anulaba en un marcaje individual a Lucas Torró y Erice apenas tenía opciones. El peligro de los azules venía siempre cuando el balón llegaba a la zona de definición, en la que la movilidad de Nando, Jonathan Pereira y Toché creaba problemas a la zaga visitante. Precisamente en una combinación de los tres jugadores surgió la primera oportunidad de los azules, pero el disparo de Nando lo atajó bien Casto en el minuto 13.

Los locales tuvieron cinco minutos en los que metieron atrás al Almería y en los que además generaron dos claras oportunidades, pero en la primera al centro de Fernández no llegaron ni Toché ni Jonathan Pereira, y en la segunda el disparo de Toché, tras un buen pase de Nando, se fue rozando el poste derecho de la portería de Casto.

A partir de ahí, el Oviedo se fue diluyendo, mientras que el Almería crecía en juego y oportunidades. La primera de ellas fue tras una falta botada por Fidel que Morcillo remató fuera y la segunda, la mejor de toda la primera mitad, un remate de cabeza al poste de Chuli, en el minuto 43, cuando los azules tenían un jugador menos en el campo por la lesión de Verdés, que acabó retirándose del terreno de juego, entrando en su lugar Óscar Gil.

En la segunda mitad, el Oviedo trató de darle más intensidad a su juego y lo consiguió en los primeros minutos, en los que además dispuso de una clara ocasión en un remate de cabeza de David Fernández, a la salida de un córner botado por Susaeta, que obligó a Casto a responder con una buena intervención.

Sólo dos minutos después llegó el gol del Oviedo en una buena combinación entre Toché y Nando, que resolvió de manera magistral el centrocampista llevando el balón a la red.

El partido lo tenía de cara el Oviedo y se le iba a poner mejor cuando en el minuto 59 el colegiado expulsó por doble amarilla a Diamanka.

El Almería reorganizó sus líneas con la entrada de Quique y Corona, pero ya no fue el equipo de la primera mitad.

Por su parte, el Oviedo optó por administrar su ventaja en el marcador. Tenía una clara posesión y trataba de asegurar los pases para no perder el control ante un rival que ya le costaba en exceso salir con el balón y más generar ocasiones ante la portería de Juan Carlos. Su mejor oportunidad llegó a balón parado en una falta que sacó Corona y remató de cabeza Antonio Puertas obligando al portero local a desviar el balón a córner en una gran intervención.

Los azules cerraron el partido a cinco minutos del final en una contra iniciada por Fernández y resuelta con acierto por Toché para poner el definitivo 2-0.