La Consejería de Sanidad está dispuesta a hacerse cargo del pago del complemento salarial que la Universidad de Oviedo había retirado a 53 de sus profesores que, además, ejercen como médicos en la sanidad pública asturiana. El complemento oscila entre 250 y 400 euros mensuales. Tras la sentencia judicial que establecía que los citados docentes tenían derecho a la percepción del citado plus, el Servicio de Salud del Principado (Sespa) se ha avenido a abonar las cuantías atrasadas de todo el año 2014 y lo que va de 2015, y a regularizar de forma oficial este pago a partir de ahora.
Lo que resta por dirimir es si el Ejecutivo regional transferirá a la Universidad los más de dos millones de euros que la institución académica le reclama desde hace tiempo como compensación a los siete años que lleva pagando el plus, después de que el Sespa dejara de hacerlo en 2007 (mientras lo mantenía a todos los demás médicos de su plantilla).
El acuerdo entre la Universidad de Oviedo y la Consejería de Sanidad ha sido alcanzado después de varios días de mensajes cruzados en los que no faltaron expresiones que traslucían un cierto nivel de desencuentro. Todo cambió anteayer, lunes, cuando el consejero de Sanidad, Faustino Blanco, anunció que ambas partes habían llegado a un acuerdo "magnífico", si bien no especificó su contenido. Ayer, el rector de la Universidad rebajó el diapasón del entusiasmo: "En el caso de que sea así, me alegro de que el Sespa vaya asumir el pago de esta partida", afirmó Vicente Gotor.
Por el momento, permanece en pie otra demanda judicial que los 53 médicos habían interpuesto contra la Universidad por reclamarles las cuantías del citado plus recibidas en los casi cuatro años que van desde abril de 2010 a diciembre de 2013. Las cantidades suman, en la mayor parte de los casos, entre 15.000 y 18.000 euros. Todo apunta a que el juez les dará la razón, pero los facultativos-profesores no quieren retirarla hasta que la solución a su problema sea oficial.
De igual modo, la Universidad de Oviedo persistirá en su exigencia hasta el momento en el que la decisión del Gobierno regional de hacerse cargo del abono del complemento quede totalmente formalizada. "Confiamos en que todo se resuelva del modo más justo para nuestros profesores y que éstos se den cuenta de que la Universidad ha dado la cara por ellos en todo momento", enfatizaron ayer fuentes de la institución académica.
Los perjudicados por este desencuentro entre instituciones son 53 profesores denominados "vinculados": catedráticos o profesores titulares que, en su mayoría, desempeñan a su vez cargos de jefes de servicio o de sección en el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA). La sentencia del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 1 de Oviedo tildaba de "evidente trato discriminatorio" el hecho de que la mejora retributiva que se otorgó a todos los médicos del Sespa en 2002 "sólo se mantuviera [...] para unos de ellos y no para otros".
