Ahora que están dando la estocada final a la filosofía en las aulas nos congratulamos de que exista el cine y cineastas que nos inviten a la reflexión. Tenemos la suerte de poder acudir al videoclub o a las plataformas de vídeo bajo demanda y poder disfrutar de joyas como Profesor Lazhar, cinta escrita -a partir de la obra de teatro de Evelyne de la Chenelière- y dirigida por Philippe Falardeau que cosechó numerosos premios gracias a su visión sobre la educación y la defensa de los derechos humanos, encarnados en un maestro de origen argelino que tendrá que sustituir a la anterior profesora, quien apareció ahorcada dentro del aula.

Y otra película que hará pensar a los jóvenes (y a cualquiera con un mínimo de interés) será el clásico, basado en la novela de William Golding, El señor de las moscas, una obra dirigida por Peter Brook que disecciona las relaciones sociales y la naturaleza humana a través de las peripecias de un grupo de niños que sobreviven en una isla desierta a un accidente de avión y que tendrán que organizarse y establecer sus propias leyes sin la ayuda de ningún adulto. Pronto surgirán los bandos y la división entre fuertes y débiles, entre bondadosos y malvados... entre los complejos humanos que somos.